JOSÉ LUIS MUÑOZ La primera vez que viajé a Alaska tenía algo menos de diez años, era un niño abducido por las lecturas de Jack London que situaba sus novelas en ese territorio helado y salvaje poblado por lobos, osos, tramperos, indios y buscadores de oro. Viajé a ese...
Goethe, el joven Werther y el comienzo de un sueño (I)
Por Fernando Chelle Un pilar en que descansó el sueño del Romanticismo En la segunda mitad del siglo XVIII, cuando las ideas de la ilustración y la estética neoclásica comenzaban a perder fuerza frente al advenimiento de ideas revolucionarias y concepciones...
Los ángeles de hielo: algunas claves
Por Sonia Rico Ni que decir tiene que los escritores están influenciados por muchas lecturas, películas e historias que se cruzan en sus vidas dejando poso. Toni Hill hace referencia en su libro " Los ángeles de hielo" a varias lecturas, quizás sea una buena...
Yo y mi chimenea
Yo y mi chimenea. Herman Melville. Ediciones Barataria. 128 pp. 10 €. Yo y mi chimenea, dos viejos fumadores canosos, residimos en el campo. Estamos, puedo asegurarlo, bien asentados aquí, sobre todo mi vieja chimenea, que se asienta más y más cada...
El poeta asesinado
El poeta asesinado. Guillaume Apollinaire. Editorial Barataria. Rústica con solapas. 160 pp. 15 €. 1 RENOMBRE La gloria de Croniamantal es hoy universal. 123 ciudades en 7 países de los 4 continentes se disputan el honor de haber visto nacer a este...
Un best seller del siglo XVIII. “Julia, o la nueva Eloísa”
Por Carlos Javier González Serrano. A mediados de 1756, Rousseau se instala en la casa de campo del Ermitage, al norte de París. Tras haber disfrutado durante más de diez años de la vida mundanal de la capital francesa, y tras haber conocido y vivido desde muy...
"La sombra del ciprés es alargada", Miguel Delibes
Os dejamos un fragmento de una de las obras cumbre de Delibes, La sombra del ciprés es alargada: «La felicidad o la desdicha era una simple cuestión de eslasticidad de nuestra facultad de desasimiento. La vida transcurría en un equilibrio constante entre el toma y el...
'Una noche con Claire', de Gaito Gazdánov [Nevsky Prospect]
laire estaba enferma; la velaba noches enteras y, al marchar de su casa, cada vez, invariablemente, perdía el último metro y entonces recorría a pie el trayecto de la calle Raynouard hasta la plaza Saint Michel, que estaba cerca de donde yo vivía. Pasaba por delante de las caballerizas de la École Militaire; desde su interior llegaba el sonido de las cadenas a las que estaban atados los caballos, y el denso olor de los equinos, tan poco habitual en París; luego a grandes pasos recorría la larga y estrecha calle Babylone, donde, al final de la cual, en el escaparate de un fotógrafo, bajo la precaria luz de las lejanas farolas, me observaba el rostro de un escritor famoso, compuesto enteramente de planos inclinados; los ojos omniscientes detrás de unas gafas de carey europeas me acompañaban media manzana, hasta que cruzaba la franja negra brillante del boulevard Raspail. Por fin llegaba a mi hotel.
'La Regenta', de Leopoldo Alas Clarín
La heroica ciudad dormía la siesta. El viento Sur, caliente y perezoso, empujaba las nubes blanquecinas que se rasgaban al correr hacia el Norte. En las calles no había más ruido que el rumor estridente de los remolinos de polvo, trapos, pajas y papeles que iban de arroyo en arroyo, de acera en acera, de esquina en esquina revolando y persiguiéndose, como mariposas que se buscan y huyen y que el aire envuelve en sus pliegues invisibles.