Columnistas

Patty y los vampiros

  Por Rubén Sánchez Trigos.   Se ha ido Patty Shepard, y no lo ha hecho con el premeditado mutis de un fundido a negro, sino con el contundente sabor a corte que dejan los ataques al corazón. Habrá quien afirme que ya se había marchado hacía muchos años, pues...

Bajo el signo de los tiempos

 José Luis Muñoz   El año que despedimos, cinematográficamente hablando, pese a la crisis que ha sacudido nuestros bolsillos y ha elevado considerablemente el precio de las entradas de cine (y ha mermado las ayudas tan necesarias al cine español) no ha sido malo,...

¿Dónde están los hombres?

Por Samantha Devin El término juventud hoy no sólo implica tener pocos años. Ahora, cuando hablamos de ser joven nos referimos también a una actitud ante la vida. Esa actitud comprende una serie de cualidades entre las que están la vitalidad, el entusiasmo, la...

Viaje al planeta Almodóvar

Por Hilario J. Rodríguez Gusten o no, las películas de Almodóvar han ayudado a destruir ciertas ideas preconcebidas en el cine español. Su continuo cuestionamiento de la identidad y su espíritu trasgresor han servido para ampliar la percepción que se tiene de nosotros en el extranjero, además de obligarnos a algunos españoles a pensar en las limitaciones que impuso la educación que recibimos, unas limitaciones que tienen menos relación con quiénes somos que con quiénes nos gustaría ser y que también ponen de relieve la necesidad de cuestionar nuestro concepto de cultura.

Observando América: una entrevista con Frederick Wiseman

Por Hilario J. Rodríguez La realidad está mal hecha, rota en pedacitos inconexos a los que sólo las artes consiguen dar una forma definida. Pero esa opción no le interesa a Frederick Wiseman. Él cree que muchas películas «inventan la realidad» o «su propia realidad», cuando lo más lógico consistiría en «inventariarla», buscar «constelaciones de sentido». Como Walter Benjamin o Georges Perec, prefiere trabajar a partir de lo existente, centrando su atención en contextos muy determinados. Utiliza los pronombres dónde, cuándo, qué, cómo y quién, no le interesan los porqués. Su método tiene algo de deriva, también de reporterismo bélico. Nunca se documenta en exceso antes de comenzar un rodaje, para no tener ideas preconcebidas; se conforma con equipos ligeros, de pocas personas, para desplazarse fácilmente.