Comienzo del 63 Festival de Mérida con La Orestíada, dirigida por José Carlos Plaza
Por Horacio Otheguy Riveira
Con La Orestíada de Esquilo el 5 de julio arranca el 63 Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida. Una tragedia colosal en nueva versión de un poeta como García Montero apasionado del teatro, puesta en escena por un gran director como José Carlos Plaza, garantías de encontrarnos ante un auténtico ensueño teatral en el gran teatro romano de la ciudad de Mérida, capital de Extremadura.
Del 5 al 9 de julio de 2017: La Orestíada de Esquilo
Versión del poeta y novelista Luis García Montero quien aporta una visión especialmente lírica en la primera expresión teatral de la Grecia Antigua (458 aC): la fuerza arrasadora del pasado cae sobre el presente, le moviliza, determina las conductas y les hace actuar. Y por primera vez el poder autocrático se transforma en la primera acción de la democracia.
Dirige el veterano maestro José Carlos Plaza, quien en 1990 dirigió otra versión al aire libre, escrita por Álvaro del Amo con Berta Riaza y Toni Cantó. Entonces se consideró una “obra-rock” con una dinámica audiovisual de ruptura escénica e ideológica, muy distinta a la actual, ahora más respetuosa con la compleja trama argumental donde todas las pasiones individuales han de enfrentarse al abuso de poder y la búsqueda de la auténtica justicia.
Ana Wagener, María Isasi, Amaia Salamanca: tres estilos de interpretación que se reúnen por vez primera en un clásico para dar vida a personajes que han dado la vuelta al mundo como mujeres adelantadas a su tiempo en su lucha denodada por ser ellas mismas en un mundo de hombres furibundos.
Ana Wagener (Málaga, La anarquista, Hamlet) y María Isasi (Incrementum, Aquí no paga nadie, Hécuba —en este mismo escenario—) tienen una trayectoria muy amplia en la que forjaron personalidades muy marcadas en el mundo del teatro, con importante proyección a su vez en cine y televisión.
Por su parte, Amaia Salamanca, con un historial centrado en la televisión, debutó en teatro dirigida por Magüi Mira en La marquesa de O en el año 2009. Su falta de experiencia para afrontar una puesta en escena de Esquilo tiene en la mano magistral del director un seguro servidor de matices expresivos que lograrán un impactante recomienzo de carrera.
Más allá de toda simplificación de mujeres buenas o malas, personajes y actrices tendrán la oportunidad de profundizar en el arte de dominar con lenguaje de hoy la caleidoscópica visión del mundo en el gran teatro del pasado.
En el papel de Agamenón, Roberto Álvarez, quien tuvo una participación en este Festival de 2011, y sobre todo en 2012, dirigido por Juan Carlos Pérez de la Fuente en una farsa de Plauto, Anfitrión, que tuvo gran impacto. Actor polifacético, en los últimos años tuvo ocasión de expandir su talento en personajes de gran riqueza dramática y notable complejidad psicológica entre piezas clásicas y contemporáneas como, por ejemplo, Casa de muñecas; En casa, en Kabul; El discurso del rey, y en la reciente Festen.
Completan el reparto: Alberto Berzal, Juan Fernández, Felipe García Vélez, Ricardo Gómez, y un coro encargado, como en la obra original, de conformar una masa de trascendental importancia en el desarrollo del argumento: Carmelo Crespo, Pepa Gracia, Emilio Gómez, Ana Goya, Montse Peidro, Sergio Ramos, Jorge Torres, Charo Zapardiel.
Tras La Orestíada, Le siguen Calígula de Albert Camus, versionada y dirigida por Mario Gas, del 12 al 16 de julio, y luego Troyanas de Eurípides, en versión de Alberto Conejero, dirigida por Carme Portaceli.
Más información en nuestro primer reportaje (El éxito que viene…) y en la Web del Festival.