“Big Little Lies”: Lo que las apariencias esconden
Por Virginia Garza
La serie, producción original de HBO, se puede ver desde el lunes 20 de febrero a través de esta plataforma.
Hay algunas series que pasan desapercibidas en televisión, no importa lo esperadas que sean por el público. Producciones que, desde su episodio piloto, muestran lentitud, escasez de intriga y falta de calidad estilística y atención por los detalles. Pero hay otro tipo de series. Esas que destacan desde su primer episodio y que te dejan mordiéndote las uñas por ver el siguiente. Sí, podríamos decir que Big Little Lies pertenece a este segundo grupo.
Pero el principal motivo no es su brillante elenco, formado por actrices de primera categoría, como Nicole Kidman, Reese Witherspoon o Laura Dern, Tampoco es que se trate de la adaptación del libro del mismo nombre, de Liane Moriarty, un superventas en Estados Unidos casi desde su publicación. Aunque estos aspectos sí han afectado respecto a la estrategia de publicidad de la serie, no es en absoluto lo que la hace brillar.
Entonces, ¿qué es lo que la convierte en especial, con un solo capítulo en antena? Todo comienza cuando un asesinato (del cual no se revela la víctima) revoluciona el pequeño y tranquilo barrio en el que se encuentran las protagonistas de nuestra historia, tres trabajadoras madres y amas de casa. Entonces vemos cómo se intercalan escenas del presente, declaraciones de habitantes del pueblo sobre éstas y, el pasado, cuando la joven madre Jane Chapman (Shailenne Woodley) llega al barrio y empiezan los problemas…
Lo que en apariencia parece un drama dirigido al público femenino al estilo de Mujeres Desesperadas, se convierte en un apasionante thriller psicológico en el que las apariencias esconden secretos muy lejos de revelarse. Las falsas amistades, las sonrisas fingidas y los secretos matrimoniales se dan cita en esta serie para ofrecer al espectador una verdadera trama de misterio, con infidelidades, acoso escolar y malos tratos muy diferente al resto de la oferta seriéfila actual.
Aunque el montaje no ofrece nada fuera de lo común, ya que solo intercala las declaraciones policiales del presente con todo lo que ocurre en el pasado, cada una de estas pistas sobre las protagonistas deja al espectador con la intriga de quiénes son realmente. A su vez, el episodio nos muestra algunos de los secretos de estas madres, al mismo tiempo que nos muestra sus emociones y sus puntos débiles de forma brillante. Y es que las interpretaciones de estas conocidas actrices no sorprenden, ya que se ajustan a la perfección a lo que nos tienen acostumbrados.
Quizás el secreto de esta nueva serie de HBO radique en lo real que es. Expone problemas de la vida real y cómo nos enfrentamos a ellos, por eso es tan fácil empatizar con cada de sus personajes. O quizás el secreto esté en el misterio, en ese lado oscuro que esconden los protagonistas y que nos deja con tantas ganas de saber más. Lo que sí está claro es que esta serie no va a pasar desapercibida.
¿Quién ha sido asesinado y por qué? ¿Qué esconden nuestras protagonistas? Por ahora, solo nos queda ver el resto de capítulos (únicamente seis), para descubrir quién es el asesino y para empezar a sospechar de cada uno de los personajes. Pero no es fácil en una historia en la que las mentiras y las apariencias lo significan todo…
Pingback: Bitacoras.com
Pingback: “Big Little Lies” llega (casi) a su fin | Culturamas, la revista de información cultural