CreaciónCuento creación

"¡No sé cómo tuve fuerzas!", de Lucía Feliú Zamora

 

«¡No sé cómo tuve fuerzas!», un relato de Lucía Feliú Zamora.

 

No sé cómo tuve fuerzas para arrastrar el cuerpo y cubrir el agujero. Mi pobre Paquito pesaba lo suyo, últimamente se había puesto gordísimo, ¡claro, no salíamos de paseo, ya nunca íbamos a ninguna parte, era un fastidio! Y eso creo que lo mató, la gordura, bueno eso y…la confianza ciega. ¡Nunca mejor dicho!,   porque últimamente cómo se había quedado un poco cegato me seguía a todas partes y yo medio distraída, medio con la mala idea que dicen me caracteriza  crucé el porche húmedo, un poco harta de tenerlo siempre en casa jadeando a mis espaldas  ¡Y ahí fue donde mi pobre Paquito dio un mal resbalón! ¡Vaya crujido que dieron sus vértebras!

 

Ahora que lo pienso, no entiendo tampoco cómo pude meterlo en aquel saco ni de dónde saqué las fuerzas para arrastrarlo por el jardín trasero y desde que el sol se puso cavar sin descanso su sepultura hasta cerca de las cuatro de la madrugada.

 

Con lágrimas en los ojos y con mucho cuidado de que la vecina no me descubriera le recé un responso, ¡pobre Paco mío!  Sé que él pasaba de rezos…pero yo recé con mucha devoción y le improvisé una disimulada cruz de palo. Y ahora ya que nadie pregunta por él porque aún piensan que se fue de casa, cada vez que me siento a la sombra de su árbol preferido,  le digo arrepentida que no le olvido, que me perdone por lo del resbalón, miro al cielo y entonces deseo con ojos llorosos que haya un estupendo cielo de perros para el bueno de mi pobre Paquito.

 

Lucía Feliú Zamora. Licenciada en filología inglesa, ha sido docente en la Universidad de Cádiz durante seis años, es en la actualidad profesora titular de inglés en I. E.S en la comunidad andaluza. Compagina la docencia y la literatura, ha publicado recientemente su cuarta novela.

4 thoughts on “"¡No sé cómo tuve fuerzas!", de Lucía Feliú Zamora

  • pensaba en un gran Gato gato gato gato gato ……

    Respuesta
  • pensaba en un gran Gato gato gato gato gato ……

    Respuesta
  • Las máquinas autoequilibradas son equipos diseñados para mantener su balance de manera automática durante la operación. Utilizan sensores y mecanismos internos para detectar desequilibrios y ajustar en tiempo real, asegurando un funcionamiento suave y eficiente. Este autoequilibrado reduce las vibraciones y el desgaste, prolonga la vida útil de la máquina, y mejora su rendimiento.

    Respuesta

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *