‘Ir a la habana’, de Leonardo Padura
Eduardo Suárez Fernández-Miranda.
Lástima de lugar, ¿verdad?… Pero fíjese que todavía esta ciudad tiene algo mágico, como un espíritu poético invencible, ¿no? Mire, aunque las ruinas circundantes sean cada vez más extensas y la mugre pretenda tragárselo todo, todavía esta ciudad tiene alma, señor Conde, y no son muchas las ciudades del mundo que pueden vanagloriarse de tener el alma así, a flor de piel… (Máscaras, Leonardo Padura).
No hace falta viajar a Cuba para recorrer las calles de La Habana. La literatura nos abre las puertas de esta ciudad bañada por un mar a veces tranquilo y a veces turbulento. La ciudad cubana ha quedado atrapada en las páginas de la obra de autores como Pedro Juan Gutiérrez quien, ya desde el propio título de sus novelas le rinde homenaje a la ciudad caribeña con novelas como Trilogía sucia de La Habana o El rey de La Habana.
Leonardo Padura es otro de los escritores cubanos que se apoderan de la ciudad tropical para reflejarla en su obra. El autor de El hombre que amaba a los perros acaba de publicar Ir a La Habana (Tusquets, 2024) un recorrido histórico y literario que nos ayudará a desentrañar el mapa de la ciudad.
Ir a La Habana está divido en dos partes: En la primera, titulada ‘Cómo llegué de Mantilla a La Habana’, Leonardo Padura nos ofrece “un paseo por los barrios de La Habana en forma de historia autobiográfica del propio novelista, que va desde Mantilla hasta los diferentes barrios de la ciudad”. Y como la literatura de Padura está empapada de la ciudad, cada uno de los capítulos se complementa con fragmentos de sus novelas, convirtiendo este libro en una guía fundamental para conocer los lugares que han inspirado su obra.
Padura contextualiza el callejero de su ciudad natal en su propia literatura. Así podremos leer el siguiente fragmento de su novela Herejes (2013): “[El joven Daniel] se ufanaría, sobre todo, de haber conseguido reconciliarse con el estrépito de La Habana, pues, al mismo tiempo, había alcanzado el empecinado propósito de sentir que pertenecía a aquella ciudad turbulenta adonde, por suerte para él, había sido arrojado por el empuje de una maldición histórica o divina”.
En la segunda parte de este libro, Leonardo Padura orienta nuestros pasos con sabiduría y conocimiento histórico de la ciudad, haciéndonos partícipes de los aspectos más sorprendentes y descocidos de La Habana. De esta forma iremos adentrándonos en los vericuetos de una ciudad que ha sabido sobrevivir, aunque sea penosamente, a los avatares de su larga historia. Carlos T. Cairo ofrece su ojo experto para mostrarnos en fotografía lo que Padura nos cuenta con sus palabras.