“Chicago”, una noche de jazz y asesinatos a sangre fría
Alberto Medina.
En una tarde típica de terral malagueño, el teatro Cervantes de Málaga estaba completo para disfrutar del musical “Chicago” que estará aquí hasta el 4 de agosto en varias sesiones diaria. Este musical que nos transporta a la época dorada del jazz, es uno de los musicales más icónicos y duraderos de Broadway. La obra debutó el 3 de junio de 1975 y ha disfrutado de varias reposiciones y adaptaciones a lo largo de los años. Fue creado por el trío legendario compuesto por el compositor John Kander, el letrista Fred Ebb y el coreógrafo y director Bob Fosse (seis premios Tony), convirtiéndose en uno de los musicales más longevos de Broadway. El musical ha sido adaptado a multitud de idiomas e incluso se realizó una adaptación cinematográfica protagonizada por Renée Zellweger, Catherine Zeta-Jones y Richard Gere que ganó seis premios Oscar, incluyendo Mejor Película.
“Chicago” está ambientado en la década de 1920 y cuenta la historia de Roxie Hart, una ama de casa y bailarina que sueña con ser una estrella de music hall. Después de asesinar a su amante, Roxie manipula al sistema judicial para evitar la pena de muerte, con la ayuda del abogado Billy Flynn. Paralelamente, Velma Kelly, una famosa artista de cabaret encarcelada por asesinato, también lucha por su libertad y su popularidad. Pero el musical trata como todo el sistema judicial americano se encontraba podrido en aquel momento y la manipulación que hacían tanto jueces, abogados como periodistas del sistema. Un musical satírico y burlón que busca la complicidad del público.
De todo el elenco destacamos a sus protagonistas: Kelly Ela Ruiz en el papel de Velma, Teresa Abarca como Roxie Hart, Billy Flynn está encarnado por Jaime Zatarain, y ‘Mama’ Morton a cargo de Inma Cuevas. Sus voces recrean a la perfección clásicos del musical como “Al son del jazz (All that jazz)” o el “Tango de la cárcel (Cell Block Tango)”. Cada número musical captura la esencia del jazz, desde el suave blues hasta el enérgico swing. La canción (nombre de la canción), interpretada en un momento crucial del espectáculo, es un ejemplo perfecto de cómo la música puede expresar emociones complejas y profundas sin necesidad de palabras.
El cuerpo de baile, que a pesar de su juventud posee una dilatada experiencia en los musicales, bailan casi deslizándose en el escenario. Cada paso, cada movimiento, es una nota musical alimentada por el jazz. La escenografía también merece una mención especial. Como un teatro dentro del teatro, es fantástico que el director de orquesta interactúe con el público. Puede que muchos esperasen unos decorados mucho más brillantes para sumergirse en la historia, pero todo lo contrario porque favorecía que los verdaderos protagonistas fueran la música y el baile. Lo que más sorprende de este musical es que la orquesta cobra todo el protagonismo pues se encuentran en todo momento encima del escenario dispuestos de una forma peculiar. La energía contagiosa resonó en todo el Teatro Cervantes desde los compases de “All that jazz”. Piano, banjo, trompetas… una orquesta que demuestra que la música en todo momento es en riguroso directo. Incluso en las coreografías podemos ver como los instrumentos brillan bajo las luces del escenario.
“Chicago” es una obra maestra que ningún amante del jazz o del teatro debería perderse. Una experiencia que promete quedarse en el corazón de quienes la presencien por mucho tiempo. Próxima parada: Gijón del 8 al 18 de agosto.
