“Canción del primer deseo”: historias cruzadas con el lastre de las buenas intenciones
Horacio Otheguy Riveira.
El pasado de la guerra civil española es un manto hediondo que cubre a los personajes, a sabiendas o inconscientemente inoculados del veneno; fluye a conciencia el cinismo de los ganadores y el miserable estado de los vencidos, largo tiempo callados, sufriendo oprobios inconfesables para no volver a atraer la ya lejana desgracia. Aunque no del todo lejana, lo mismo que los sueños truncados, las ilusiones aún en el aire o los cuerpos desnudos con distintas corrientes de frenesí. El de una mujer entrada en años, bien lavada por un extranjero que, con mano fraternal, lo despoja de miserias del espíritu a través de palpables sudores; o el de un hombre desesperado por amar a otro hombre.
Con una firme puesta en escena de corte realista, los diversos episodios se suceden con afán poético y testimonial. Lo hacen con diversa fortuna, atravesando el melodrama superficial en la relación de los hermanos muy mal avenidos y demasiado llorosos por sus infortunios, o el testimonio desgarrado de una mujer a la que le obligaron a tomar una trágica decisión de la que no cesa de lamentarse.
Entre medias, otras historias que aspiran a dar testimonio sociopolítico y no lo consiguen por acumulación de ideas con más buenas intenciones que logros. Ni en el texto ni con los visibles aportes de la dirección se consiguen armonizar tantas emociones, entrelazadas entre pasiones y ahogados susurros portadores de homosexualidad frustrada, maternidad castigada, abuso de poder de la policía del régimen franquista, una violación en hermosa playa, drama de inmigrante colombiano en Madrid, solitarias mujeres marginadas, con una niña “robada” primero y luego sexualmente violentada…
Algunas influencias saltan a la vista, dentro del desigual desarrollo de la función. Por ejemplo: la atmósfera de Los desnudos y los muertos, que escribiera Norman Mailer en 1948 ante las grietas amargas de la segunda guerra [“desnudos ante la muerte y la miseria de la guerra”], y La decisión de Sophie, novela de 1979 escrita por William Styron, llevada al cine con Meryl Streep: clave en la literatura de la segunda posguerra mundial, encarnando los trastornos emocionales de una madre superviviente de campo de concentración. Obras maestras que flotan en el ambiente de este texto, y se quedan fuera, como mirando por un ventanuco polvoriento, dada la ligereza con que en la obra se plantean temas tan ricos con elementales matices.
El reparto es muy bueno y todos logran hace verosímil la exposición ideológica de un texto, insisto, muy por debajo de sus ambiciones.
Canción del primer deseo
Autor: Andrew Bovell
Versión: Jorge Muriel
Dirección: Julián Fuentes Reta
Intérpretes: Consuelo Trujillo, Pilar Gómez / Olga Díaz, Borja Maestre, Jorge Muriel
Diseño de Iluminación: Ciru Cerdeiriña
Espacio sonoro: Iñaki Rubio
Espacio escénico: Julián Fuentes Reta/Ciru Cerdeiriña
Ayudante de escenografía: Carlos Brayda
Asistencia de dirección: Angelina Mrakic
Vestuario: Berta Grasset
Fotografías: Javier Naval
Trailer y contenido audiovisual: David González/2 VISUAL
Jefa de Producción: Beatrice Binotti
Dirección de producción: Nadia Corral
Agradecimientos: Yolanda Mozota y Pau Arán Gimeno