Super-A
Por Àngels S. Amorós
Mercè Galí (texto) y Txabi Arnal (ilustraciones). Super-A. Salamanca: La Guarida ediciones (colecció Pi), febrero de 2021. 40 pp. A partir de los 4 años de edad.
Una vez en el Templo de los Cien Ojos Legañosos y Estudiosos,
el Gran Maestro te entregará una hoja repleta de enigmas que deberás resolver.
SUPER-A no es una niña excepcional, aunque a juzgar por todas las tareas que tiene que emprender cada día parece que sí. La verdad es que ser niño hoy en día resulta agotador porque los adultos nos empeñamos en pensar que los niños tienen que estar bien preparados para el futuro y eso se traduce en innumerables actividades extraescolares. No es justo proyectar en los hijos las expectativas y sueños no cumplidos de los padres porque cada individuo tiene derecho a desenvolverse a un ritmo diferente y no siempre sus aspiraciones coinciden con las nuestras.
De este modo, la historia de SUPER-A resulta tan entrañable y cercana y aunque los autores aborden la cuestión desde el humor es innegable la llamada de atención que supone para los adultos -ya sean padres, docentes o educadores- y la sociedad entera para poner freno a las muchas actividades que tienen programadas los pequeños.
El libro nos introduce en un día en la vida de una niña cuyo primer reto empieza con levantarse de la cama. Su amigo el perro doméstico pasa a ser su peor enemigo porque no es buen ejemplo para ella. A su amiguito peludo le encanta dormitar a todas horas y remolonear de buena mañana. ¡Quién fuera él! Sin embargo, SUPER-A, como muy bien su nombre indica, tiene muchas misiones que cumplir.
La ducha, el desayuno nutritivo, asistir a la escuela después de lidiar con el tráfico que bien pronto esperan con ansia el cambio de semáforo o las recomendaciones de cuidar el planeta son solo algunos ejemplos de cómo de dura es la vida de un niño. Y si eso no fuera suficiente, SUPER-A tiene que colaborar en casa haciendo la compra o -¡horror! sacando la basura.
A destacar el lenguaje tan cuidado de Mercè Galí que llama Superintendenta a la mamá, uniforme nocturno al pijama y Templo de los Cien Ojos Legañosos y Estudiosos a la escuela.
Una lectura muy placentera y curiosa que provocará muchas risas y -esperemos que sea así- reflexiones. También auguramos que tal vez a los niños no les haga tanta gracia y este libro sirva como instrumento reivindicativo que justifique la sobreexplotación a la que están sometidos nuestros pequeños. Un paso en la nueva concepción de la educación libre de todo moralismo pero sí bastante crítico. Damos la enhorabuena más sincera al tándem formado por las maravillosas ilustraciones de Txabi Arnal que recrean estupendamente todas las fases a las que está sometida esta niña representante de la infancia en general. Lo mismo que el textode Mercè Galí donde no sobra nada y las numerosas metáforas que construye no tiene nada de gratuito. Y ahora, futuros lectores, a disfrutar de la lectura y a reflexionar más que nunca sobre lo leído.