El escritor que no se acaba nunca
Ese famoso abismo / Chet Baker piensa en su arte
Enrique Vila-Matas
Editorial Wunderkammer
Gerona 2020 170 y 201 páginas
EL ESCRITOR QUE NO SE ACABA NUNCA
Por Iñigo Linaje
Hay escritores que fundan su mundo literario a partir de materiales extraídos de la ficción. Y escritores que se sirven de lecturas y viajes, de sueños y vivencias personales para elaborar sus libros. Hablamos, en este segundo caso, de autoficción, ese experimento que en las últimas décadas ha roto barreras genéricas dando lugar a una escritura en la que, entre otras cosas, toman una relevancia esencial el ensayo, el cuaderno de viajes, el apunte de diario y la vida del autor.
En este tipo de narraciones el escritor puede tomar las identidades más insospechadas: desde la del joven periodista que entrevista a Marlon Brando hasta la del cinéfilo que aparece en películas clandestinas. Desde la del enfermo de literatura que consigna citas y recuerdos a la del tipo que se traslada a Turín y especula sobre la obra de Xavier de Maistre. El narrador -en cualquier caso- puede ser quien quiera ser, pero lo importante es que sus pesquisas queden expuestas en la página de manera verosímil, es decir, que su discurso sea creíble y pueda llegar al entendimiento de un lector atento: al entendimiento de alguien que, por supuesto, no solo quiera encontrar en un libro una manera vulgar de pasar el tiempo.
Este es el caso de Enrique Vila-Matas, un letraherido que ha frecuentado múltiples géneros -que van del periodismo a la novela pasando por el relato- y que lleva muchísimos años practicando una literatura que hibrida ensayo, dietario y autobiografía. Este modo de operar podemos encontrarlo, por ejemplo, en la novela corta Chet Baker piensa en su arte, que acaba de reeditar -por primera vez de forma independiente- el sello gerundense Wunderkammer.
Este relato largo o nouvelle plantea la historia de un crítico literario que pretende salvar la narrativa de ficción de su anquilosamiento. Para ello viaja a Turín y se aloja cerca del lugar donde Xavier de Maistre dio forma a su Viaje alrededor de una habitación. Pocas aventuras encontrará el lector en estas páginas, ya que el mismo protagonista -un trasunto del propio Vila-Matas- confiesa en un momento dado que no hace nada “salvo ensayar cómo sería la ficción crítica si él hiciese ficción crítica”. Sin embargo, fragmento a fragmento, y mientras elabora toda una teoría literaria repleta de digresiones, van compareciendo a lo largo del texto sus fetiches literarios: Sergio Pitol y Georges Perec, James Joyce y Samuel Beckett, Borges y Sergio Chejfec.
Todas esas filiaciones literarias (también musicales y cinematográficas) aparecen en Ese famoso abismo, un volumen hermosamente editado que recoge un puñado de entrevistas con el autor realizadas por Anna María Iglesia. Hay que decir que la periodista granadina ha realizado aquí una labor excelente. Y es que al trabajo intenso de documentación y al sólido andamiaje estructural de la obra, profusa en anécdotas e indagadora en su contenido -y no solo gracias al entrevistado-, hay que añadir la gran habilidad en el reporteo de la autora: muy atenta al discurso vilamatiano y perspicaz en sus inquisiciones.
Las conversaciones recogidas en Ese famoso abismo, mucho más enjundiosas y profundas que una entrevista ordinaria, son tan recomendables para el lector profano como para quien conoce la obra de este escritor absolutamente poliédrico. Divididas en ocho secciones, donde se aborda tanto el pasado y el futuro de la novela como la trayectoria literaria del autor, en ellas encontraremos de todo: anécdotas de juventud, recuerdos de la Barcelona de los 80, encuentros y desencuentros, manías y curiosidades. Todo ello ensamblado en un discurso riguroso lleno de conocimiento, sabiduría enciclopédica y abundantes notas de humor. Quizás no haya mejor manera -en este momento- de conocer los juicios y la escritura de Enrique Vila-Matas que adentrándose en estos dos libros felizmente complementarios.
Corta reseña. Pero ilustrativa.