Un mundo en una caja
Título: UN MUNDO EN UNA CAJA
Autora: MARÍA JESÚS MINGOT
Ilustraciones: LUIS HERRERO MATEO
CASA EDITORIAL AZULETE
Fecha publicación: 1/11/2017
Formato: 12 x 21 cm
Encuadernación: Rústica
Páginas: 160
P.V.P.: 10,40 €
Edad: +9 años
Un día cualquiera, aparece una caja, cerrada y sin remitente ni destinatario, en la puerta de la casa de Ana, una niña de 7 años. A partir de ese momento, y desde la mirada de esa inocente forma de enfocar el mundo, los acontecimientos se irán sucediendo consiguiendo que la magia, el misterio y todo aquello “imposible”, vaya surgiendo y asimilándose, no solo como algo dentro de lo posible, sino sobre todo, dentro de lo deseable.
«Ella elegía ser un indio, pues aunque los indios perdieran, eso era mejor que tener siempre la batalla asegurada; y ese espíritu de aventura, que le había llevado a no cansarse nunca de perseguir al mismo soldado al que había disparado la flecha tantas veces como este había revivido, era el mismo que la empujaba ahora a disfrutar del hecho de volver a emprender camino sin saber adónde ni cómo.»
Se hace palpable para el adulto esa visión perdida de la infancia en la que todo es posible, en la que la imaginación no tiene límites ni trabas, y en la que solamente sobra el hastío del adulto, las supuestas reglas del mundo.
«Cada vez que su padre decía que un asunto “coleaba”, o la abuela repetía que se “moría del susto”, Ana no dejaba de preguntarse cómo podía una asunto colear sin tener cola, o la abuela haberse muerto tantas veces del susto y seguir, por suerte, en este mundo.»
Una entrada a un mundo mágico, onírico y particular.
María Jesús Mingot, poeta, nos decubre una faceta nueva de su literatura, esta vez en principio enfocada al lector infantil y juvenil, pero que, sin embargo, convendría leer a cualquier edad. Nada malo puede hacerle a uno el recordar esa vieja ilusión por los potenciales renaceres que brinda el ilusionarse por algo y dejarse llevar.
«…como Alicia ante el espejo, ese cuento que le seguía fascinando porque nunca acababa de entenderlo, donde todo era posible y, en cada lectura, encontraba un nuevo mundo por explorar. También ella pasaba ahora a través del espejo, hay muchas Alicias por descubrir y muchos espejos mágicos agazapados en las cosas más ordinarias, solo aguardan a ser descubiertos…»