Crímenes duplicados
Por Rosy de No Solo Leo.
Son pocos, pero en ocasiones dos autores se unen para crear una historia con la que impactar a los lectores. En este caso, dos guionistas suecos, Michael Hjorth y Hans Rosenfeldt, han colaborado para crear esta serie que lleva el nombre del protagonista Bergman, con la que están cosechando grandes éxitos en toda Europa. “Crímenes duplicados” es la segunda entrega posterior a “Secretos imperfectos” y de la que se espera en breve la publicación en español de la tercera “Muertos prescindibles”.
“Mientras una ola de calor azota Estocolmo, una serie de mujeres son halladas brutalmente asesinadas, y la brigada de investigación criminal se encuentra en un callejón sin salida. Los cuerpos llevan la firma de Edward Hinde, un asesino en serie encarcelado hace quince años gracias al psicólogo Sebastian Bergman. Sebastian, por su parte, necesita poner orden en su caótica vida y actuar de una vez por todas ante la revelación con la que acababa Secretos imperfectos. Gracias a sus artimañas habituales, consigue hacerse un hueco en la investigación y pronto descubre que todos los asesinatos están relacionados con él y que nadie a su alrededor está a salvo. Ni él mismo.”
Es difícil establecer los límites entre lo creado por un autor y otro; no existen fisuras en el desarrollo de la obra y es increíble observar como se mantiene la misma línea en toda la trama cuando son dos los que intervienen en el devenir de los personajes, quedándose uno con la duda de qué parte corresponde a cada uno de ellos o cuáles son sus respectivos papeles dentro del tándem.
Lejos quedó el típico detective de gabardina y gorro a juego y sempiterno cigarrillo en la boca, tal vez, bebedor empedernido. Los escritores cada vez se devanan más los sesos para impactarnos con personajes atípicos y únicos. Bergman no iba a ser diferente. Obsesivo, marcado por el pasado, adicto al sexo, lo que le meterá en más de un problema aunque no tanto como su cruda franqueza, gracias a la cual va creándose “amigos” allá donde va. Lo maravilloso de la literatura es que el escritor nos lleva a un mundo imaginario en el que no podemos interceder, aunque en ocasiones quisiéremos matar al protagonista; sin duda este es un personaje que nos trasmitirá sentimientos enfrentados desde la rabia a la compasión. Desespera su apatía y lo que tarda en comenzar a actuar y hacer lo que mejor sabe, cazar asesinos.
Esa evolución que vamos observando en Bergman también se vislumbra en el resto de los personajes, por lo que es impensable leer alternas las diferentes partes de esta serie si queremos disfrutar plenamente de los entresijos de las distintas investigaciones, ya que a pesar de presentarnos casos alejados unos de otros, y que se resuelven, quedan secretillos que se irán desvelando en posteriores entregas y los personajes nos van resultando más familiares a lo largo de cada una de las novelas. Se van perfilando las personalidades de cada uno así como sus inquietudes y deseos, tal vez siendo este uno de los aspectos más característicos de la serie y que nos permite adentrarnos con profundidad en ella.
El pasado pasa factura y un antiguo contendiente de Bergman, ahora entre rejas, le está echando un nuevo pulso. Una a una las mujeres van muriendo. El asesino nos va descubriendo sus macabros planes en su deseo de agradar a su Maestro, e imitando sus antiguas hazañas llegando tal vez el momento en el que el acólito supere a su mentor.
Contumaz, autodestructivo y dañino, ese es Sebastian, al que conoceréis si os adentráis en estas novelas, pero en el que también observaréis un rasgo de lo más humano, querer sobrevivir y encajar en algún sitio. Él llega a la conclusión que para formar parte de la vida de otras personas es necesario tener una propia y en el intento de construirla con los jirones de su pasado no hace sino que enloquecer a quienes le rodean, aislándolo aún más si cabe.
Lo impensable puede suceder en el vaivén de los numerosos cambios que suceden en la trama. Un caso de lo más interesante con personajes que trascienden más allá de unas cuartillas unidas entre sí; una serie televisiva, dinámica plasmada en papel, que invita a seguir la investigación para detener la masacre que se cierne sobre Suecia.
Michael Hjorth y Hans Rosenfeldt son dos escritores suecos que trabajan juntos para la serie Bergman, cuyo protagonista es un un psicólogo forense, hasta el momento llevan publicadas cinco novelas. Las dos primeras novelas las adaptaron para una miniserie titulada “Sebastián Bergman” que estrenaron en 2010.
Michael Hjorth nació en Visby en 1963 trabaja como productor de cine y televisión. Es uno de los propietarios y fundadores de la productora “Tre Vänner”. Escribió los guiones para la serie y películas suecas de la serie del inspector Kurt Wallander de Henning Mankell.
Hans Rosenfeldt es un guionista sueco nacido en Borås en 1964. Ha pasado por varios trabajos, entrenador de leones marinos, conductor, profesor, actor, antes de recalar en la televisión.
Ha escrito guiones para al menos veinte series de ficción, y también ha trabajado en programas de radio y televisión. Es conocido por crear la serie escandinava “The brigde” que ha alcanzado gran éxito y que por el momento tiene tres temporadas. Está inmerso en un nuevo proyecto para la televisión inglesa, la serie “Marcella” protagonizada por una exdetective.
Sus grandes pasiones son escribir, jugar a los videojuegos y pasar tiempo con su familia.
BIBLIOGRAFÍA:
NOVELA:
SERIE SEBASTIÁN BERGMAN:
“Secretos imperfectos” (2010)
“Crímenes duplicados” (2011)
“Muertes prescindibles” (2012)
“The silent girl” (2014)
“Those who failed” (2015)