La microguerra de todos los tiempos
Ilustraciones: RAFA VIVAS
Editorial: SIRUELA
Formato: 15 x 23 cm
Encuadernación: Rústica
Páginas: 96
PVP: 14,90 €
Colección: Las tres edades 259
Género: Literatura infantil y juevenil
Por José R. Cortés Criado
Andrés Barba nos lleva al tema del tiempo, sobre todo para los que están muy preocupados por perderlo. En esta historia, los protagonistas son dos niños muy opuestos, Manuel, que siempre va corriendo a todas partes y apenas ve lo que acontece al su alrededor y Mara, una niña súper tranquila que nunca tiene prisas y vive felizmente cada momento de su vida.
Estos protagonistas vivían en Gambronia, ciudad muy preocupada por el tiempo, tanto que todos sus habitantes están pendientes del reloj de la plaza que construyó el insigne relojero italiano Somato Frantantoni.
Hora a hora todos controlan que su reloj personal esté en hora, nadie quiere perder un segundo, todos tienen múltiples relojes, pero el tiempo se les va en esa preocupación con lo que no disfrutan de lo que tienen.
El tema es muy adecuado, sobre todo hoy que todos vivimos intensamente las veinticuatro horas del día y siempre nos falta tiempo para hacer algo nuevo, y su mensaje muy esclarecedor: para ganar el tiempo hay que saber perderlo.
Estos niños son los encargados de reparar el reloj de la plaza el día que se alteró y todos los habitantes de la ciudad andaban preocupados por no saber qué hora era exactamente cada vez que miraban su reloj; para ello han de tomarse una pastilla que les reduce de tamaño, como Alicia, e introducirse en su mecanismo.
Una vez dentro se encuentran tres territorios enemistados en continua batalla, el ayer, el hoy y el mañana. De las tribulaciones de cada ejército, de las preocupaciones por el tiempo perdido, el momento presente o el tiempo que vendrá versarán las conversaciones de los niños con los personajes que viven dentro del reloj.
Al final todo se soluciona, cuando los habitantes de Gambronia dejan de estar obsesionados con el tiempo y aprenden a perderlo en cosas importantes como dar un beso a la persona amada, caminar más despacio o detenerse a recordar algo importante tras una respiración profunda.
Buen libro, ameno, entretenido, original, que atrapa al lector en el tiempo presente, pasado y futuro.