Charles Dickens, el maestro de la crítica social
Por Pilar Martínez.
Fue uno de los mayores especialistas de la narrativa, el humor y la ironía, y aunque no podemos saber con exactitud la que fuera su visión sobre la sociedad y realidad del momento, seguro que como ya ocurrió con anterioridad, no dejaría indiferente a nadie.
Considerado uno de los mejores novelistas ingleses de todos los tiempos, figura emblemática de la literatura universal y personaje fundamental de la era victoriana, Charles Dickens se convertiría con el paso del tiempo en un ídolo literario venerado por escritores de todo el mundo.
A diferencia de lo ocurrido con otros compañeros de profesión, sus novelas y relatos cortos disfrutaron de gran fama y popularidad en vida del escritor, y de hecho hoy en día se siguen editando y adaptando al cine continuamente. Debido a los problemas económicos de la época Dickens publicaba sus novelas por entregas, ya que la mayoría de la población no podían comprar un libro. Esto aumentaba el entusiasmo de los lectores por cada una de las entregas que iban recibiendo.
El estilo de Dickens destaca por su floritura y carácter poético, en él el toque cómico se encuentra presente como base fundamental de sus obras. Los personajes creados por Dickens se han convertido en los más memorables y creativos de la literatura inglesa, algunos de ellos como Oliver Twitst o Ebenezer Sccrooge se hicieron un hueco de honor en el mundo de la literatura. Las excentricidades y el toque grotesco con el que el autor caracterizaba a sus personajes se convirtió en su seña de identidad, aunque en ningún momento lograron eclipsar la obra de Dickens.
Londres se convirtió en el centro de la acción de la mayoría de las obras de Dickens. Abarcó desde los bares que se encontraban en las afueras de la ciudad hasta las orillas de río Támesis. Un viaje por el Londres de la época es una de las múltiples maravillas que encontramos al sumergirnos en todas y cada una de sus obras. Gracias al amor que Dickens sentía por esta ciudad y sus largas caminatas a través de ella, sus obras se convirtieron en el mejor mapa que podíamos encontrar, y él el mejor guía.
“Oliver Twist“, “Un cuento de navidad” o “La pequeña Dorrit” son algunas de las más emblemáticas construcciones de Charles Dickens. En ellas como en el resto de sus obras, la crítica a la pobreza y a la estratificación social de la era victoriana fueron un punto clave para el desarrollo de las mismas. La empatía por el hombre común y el especticismo hacia ciertas clases de la sociedad como la burguesía, marcaron de manera clara a Dickens y a sus construcciones, convirtiéndolas en grandes trabajos de crítica social.
Nos mostró como amar y celebrar la Navidad de una manera diferente, a la vez que llevó a cabo una lucha incansable por los más desfavorecidos. Con su más que conocido toque de humor y sátira, la idealización de los personajes y sus escenas de alto carácter sentimental combatió y denunció el trato que recibían los trabajadores por parte del empresario, quienes eran tratados como simples “manos” en plena revolución industrial.
Además de importantes elementos sociales y reivindicativos, las obras de Dickens se caracterizaron por sus amplios toques autobiográficos. Procedente de un familia humilde, pero rico de mente y alma, Dickens consiguió solventar su parca formación-no cursaría estudios hasta después de los 9 año- gracias a su innato talento para la escritura. Hasta la publicación de su biografía seis años después de su muerte, escrita por Jhon Foster y en la que él mismo participó, poco se sabía de la vida del que sería uno de los escritores más influyentes de la literatura inglesa. Un pasado, en muchas ocasiones tildado incluso de vergonzoso hasta por el propio autor, humilde y oscuro en tiempos victorianos, podía arruinar la reputación incluso de uno de los escritores más seguidos de su tiempo. Un temor que siempre marcó el carácter y obras del autor.
Personajes inolvidables y grotescos, una gran y profunda sensibilidad social y un enorme dominio de la lengua inglesa, son los ingredientes principales para la cocción de algunas de las mejores obras de la literatura mundial. Tanto ellas como Dickens tuvieron una gran influencia en escritores posteriores, periodistas e incluso políticos, consiguiendo que se incorporaran en sus agendas todos aquellos problemas de los que Dickens dio testimonio. A pesar de que su fama decayó un poco tras su muerte en 1870, Dickens siguió manteniéndose como uno de los escritores más brillantes e innovadores de su tiempo, y sus personajes e historias se convirtieron en reconocidos arquetipos literarios que se ganaron un puesto de gran relevancia en la mente e imaginación de todos y cada uno de los lectores. Estelares historias y reconocidos personajes que llegaron a nuestras vidas, pero esta vez para quedarse con nosotros.
Un comentario 😉
dislike te copias del rubius