Ortega y Marañón, dos legados unidos
Las fundaciones que preservan el legado intelectual de dos de los exponentes intelectuales más destacados del pasado siglo en nuestro país, José Ortega y Gasset y Gregorio Marañón, han decidido fusionarse y crear una única entidad: Fundación Ortega-Marañón. Es la primera vez que en España se fusionan dos fundaciones de tanta proyección en el ámbito cultural.
José Ortega y Gasset y Gregorio Marañón caracterizaron una época muy significativa de la historia de España. Su amistad, admiración y respeto mutuo hicieron posible que emprendieran empresas comunes de índole intelectual, científica, social y política. Este vínculo ha trascendido a colaboradores y discípulos de ambos y se ha perpetuado en el tiempo a través de cuatro generaciones de las familias Ortega y Marañón, desde la amistad entre D. José Ortega Munilla y D. Miguel Moya, hasta sus nietos y bisnietos.
Los patronatos de ambas fundaciones han decido sellar esta centenaria amistad impulsando la fusión de las dos fundaciones que custodian y difunden el legado personal, intelectual, filosófico y científico de José Ortega y Gasset y de Gregorio Marañón. Pero esta fusión va más allá del cariño y de los vínculos amistosos entre ambas fundaciones. Según José Varela Ortega, “se trata de prestar un servicio a la sociedad y de asegurar la perennidad también de la Fundación Gregorio Marañón”.
En el ámbito del pensamiento y la educación, la Fundación Ortega-Marañón, con su Instituto Universitario de Investigación, es una institución de referencia internacional, con presencia en Europa y América Latina. Cuenta con más de 15 sedes en 5 países, con la biblioteca más visitada de la Red Iris del CSIC, más de 100 colaboradores fijos, 150 investigadores, 850 profesores y más de 2.500 alumnos. La nueva Fundación, que albergará el legado de las dos personalidades intelectuales más importantes del siglo XX, custodiará el archivo de José Ortega y Gasset, el de la Residencia de Señoritas y el de Gregorio Marañón, los tres digitalizados. En su conjunto constituirá uno de los archivos más completos de este periodo de la historia, importantísimo en nuestro país.
En referencia a la fusión, Alejando Fernández de Araoz se ha referido a ella “como un proyecto vivo que hubiese sido calificada por D. Gregorio Marañón como admirable, y así es como yo también la defino”, ha dicho. Por su parte, Jesús Sánchez Lambás, director general de la Fundación, señaló que “la unión de la Fundaciones José Ortega y Gasset y Gregorio Marañón viene a crear un nuevo apellido cultural que integra a dos de las más grandes personalidades de la primera mitad del siglo XX y lo proyecta al siglo XXI. Todo este esfuerzo es, en definitiva, para progresar y servir a la sociedad de su tiempo formando capital humano: sólo desde la educación y el conocimiento se rompen fronteras y se construye un mejor futuro”.
Gregorio Marañón y Bertrán de Lis, vicepresidente de la Fundación Ortega-Marañón, ha querido destacar las dos caras de la nueva fundación, el Humanismo y la Ciencia, “dos condiciones inseparables para entender la condición humana”. Además, ha señalado que el papel de la Fundación Ortega-Marañón se piensa desde una perspectiva liberal, “entendiendo el liberalismo como ese compromiso solidario y ético con la libertad de todos”, ha añadido. Se trata también de un mensaje fuerte hacia el tercer sector, siendo la primera fusión entre fundaciones en España. “Es hora -según Jesús Sánchez Lambás, director general de la Fundación- de sumar, converger, integrarse y dejar a un lado los personalismos y localismos para construir una posición más fuerte”.
La institución seguirá trabajando, como decía Ortega, “en las cosas de nuestro tiempo”: investigando en América Latina Contemporánea, Migraciones, Relaciones Internacionales, Gobierno, Cooperación al Desarrollo, Cultura Contemporánea, Salud, Bioética, Liberalismo, Comunicación Política, los nuevos Marcos Regulatorios de la Economía y del Derecho, Seguridad y Gestión de Crisis, la Sociedad Civil frente al Terrorismo, etc.