Cuando fumar era sano y el azúcar adelgazaba
Fuente: Diario de gastronomía
Eran épocas en las que fumar estaba socialmente bien visto y las calorías parecían no importar a nadie. Además, la entonces incipiente actividad publicitaria no sólo reflejaba fielmente estos sentimientos populares, sino que en buena medida ayudaba a fortalecerlos con propuestas que, vistas desde una óptica actual, consideraríamos como poco, extravagantes.
Es el caso de este anuncio estadounidense de Camel, en el que se asegura que “la mayoría de los médicos fuman Camel más que cualquier otra marca de cigarrillos”. En el texto se especifica que “doctores de todas las ramas de la medicina, 113.597 en total, han sido consultados a través de un estudio nacional sobre sus preferencias en cuanto a cigarrillos, siendo Camel la marca más nombrada en sus respuestas”.
O este otro de Lucky Strike, en el que el tabaco se presenta como una buena alternativa en las dietas de adelgazamiento, al argumentar que “a nadie le molesta tener una buena figura”, mientras sugiere “fumar un Lucky en lugar de tomar un dulce”. Una tentación que sustituye a otra, eso sí, ambas dejadas a la libre elección del consumidor.
Hablando de dietas, esta campaña genérica sobre el azúcar asegura que “El azúcar puede ser la fuerza de voluntad que necesita para comer menos”. El texto justifica que cuando estamos hambrientos, generalmente, eso significa que estamos bajos de energía, algo que se soluciona rápidamente con un par de cucharaditas de azúcar.
En este caso, el anunciante recomienda dar de beber a un bebé un refresco como Seven Up, con todo su azúcar y sus calorías, argumentando que es tan puro…tan sano, que resulta un placer. Continúa destacando diversas cualidades del producto para concluir que es un refresco tan “centelleante, tan vibrante, que se convierte fácilmente en la bebida para toda la familia”.
Y finalmente, esta ‘joya’ nacional en la que se invita a “beber sin temor”, pero asegurándose “de tener siempre a mano una tableta de Calmante Vitaminado que le garantiza una mente clara, despejada y nuevos ímpetus para reemprender su labor cotidiana”. El anuncio finaliza con un toque de tranquilidad al presunto bebedor: “Ya todo ha pasado con Calmante Vitaminado, la tableta que da bienestar y tonifica los nervios”.