Angelo Petrosino presenta ‘Valentina en París’
Ayer por la tarde se presentó en el Pabellón Infantil de El Retiro de Madrid Valentina, aventura en París, la tercera novela de la conocida serie de Angelo Petrosino editada en nuestro país por Romana Editorial, que ha atrapado en Italia a más dos millones y medio de lectores. Allí en el marco de la 71º edición de la Feria del Libro, se presentó la novela infantil por su autor Angelo Petrosino, Davide Scalmani del Instituto Italiano de Cultura y Carmen Magallón de la editorial Romana. Valentina es una niña de 13 años, de primero de la ESO, muy curiosa, que valora mucho la amistad y es muy popular entre sus compañeros. El autor ha escrito ya 110 títulos de la serie Valentina en los últimos once años, de los cuales se han publicado solo tres en España, y la serie ya está llegando en Italia al momento en que la protagonista comienza el Instituto.
Davide Scalmani resaltó que la colección de Angelo Petrosino “suscita el interés de los lectores con una lengua muy sencilla, muy vivaz”. Carmen Magallón explicó que se trata de “un personaje muy querido por el público italiano por las niñas sobretodo” y que desde la editorial, que ya están trabajando en el cuarto libro de la serie El Diario secreto de Valentina, se han lanzado a “este desafío ya que cuesta introducir nuevo personaje infantil pero hemos apostado por Valentina porque es una niña muy simpática, alegre, que tiene popularidad en el colegio y que conquista a los lectores siendo ella misma”. También destacó que en la serie “se reflexiona sobre cómo los forman los valores y los sentimientos en la adolescencia”.
El autor explicó que Valentina ha nacido en la escuelo porque él ha trabajado como un profesor de primaria en un colegio de Turín y ha conocido en estos años muy bien a los niños y las niñas. Además Valentina nace porque en Italia no había personajes femeninos infantiles y por eso creó a esta niña curiosa, muy viva, a la que le gusta mucho viajar: “Quería que fuese un modelo para otras niñas y que el personaje se basase en una niña real que viviese aventuras reales. Valentina es una amiga ideal, alguien en quien reconocerse, fiel a sus amigas…”.
Además el autor comentó que quería que viajase porque él ha viajado mucho: “En casi 20 años he viajado por todas partes: Italia, Suiza, Francia… Intento meter en mis libros mis recuerdos personales, las personas que he conocido, los lugares que pisado… A los niños les gustan los niños que cambian, que tienen aventuras, viajes… He intentado contar en la última entrega de Valentina, como era el París que yo había conocido de niño, sus calles, sus gentes”.
El autor resaltó que uno de los aciertos del libro es que en Valentina se señalan como importantes aspectos como la amistad o tener una familia unida: “Cuando un niño crece es muy importante tener un amigo del alma, también estar en una familia en la que todos hablan y en la que unos se escuchan a los otros como la familia de Valentina. También toco el tema de la adopción, con el personaje de Irene, porque yo he tenido en acogida niños de la escuela y es un problema que he conocido”.
Sobre el éxito de Valentina, que ya ha vendido más de dos millones y medio de libros en Italia, el autor comentó que “para escribir algo y que tenga éxito es necesario conocer de qué se está hablando. He esperado mucho para escribir, no empecé a hacerlo hasta que tuve cuarenta años, en 1981 porque quería saber de qué quería hablar con los niños. Mis primeros cuentos tenían a mis alumnos como protagonistas y ellos mismos me animaron a seguir escribiendo”.
Angelo Petrosino comentó que Valentina no es un personaje real, una niña real: “El año que lo creé tenía en clase 6 niñas llamadas Valentina, con ese nombre y el personaje tiene algo de cada una de estas niñas. Nacho sin embargo está basado en un niño que ahora tiene 27 años y que dejaba de jugar para cuidar de otro niño que estaba en silla de ruedas”.
Para terminar el autor explicó que los niños hoy tienen poco tiempo para leer: “Yo por eso en clase tenía centenares de libros para que pudiesen leer en el aula porque en casa no tenían tiempo. Es importante comenzar a amar los libros a los 4 ó 5 años. Mi trabajo ha sido siempre formar lectores felices. Hay muchas personas que viven bien sin leer, pero se vive mejor si uno lee”.