Las manos de un neurocirujano son algo fascinante. Porque, a menudo, son la fina línea que separa la vida de la muerte para un sinfín de personas. Sin embargo, esas manos tienen vida más allá del bisturí y lo que hay detrás de ellas es una humanidad extrema.

La doctora Gloria Villalba vive la neurocirugía no solo con verdadera pasión, sino como una auténtica adicción. En este impactante libro se desnuda sin censura y nos abre los secretos de su consulta, al tiempo que nos revela las dificultades de ser mujer en un campo tan competitivo o la importancia de la empatía para sobrevivir en él.

Estas páginas nos revelan una personalidad indomable, que contrasta con una sensibilidad y empatía extraordinarias. Porque, como ella misma confiesa, no le ha sido fácil (ni lo es tampoco ahora) trabajar en una profesión con zonas muy oscuras, donde la integridad y la justicia demasiado a menudo brillan por su ausencia.

A lo largo de estas páginas, la doctora Villalba entreteje las complejas historias de sus pacientes, sus familias y la suya propia. Y en su relato, las personas a las que ha tratado se convierten en personajes únicos de un mundo, el suyo, lleno de crudeza y belleza.

Gloria Villalba (Barcelona, 1975) estudió Medicina en la Universidad de Barcelona y completó su formación como neurocirujana en el Hospital Clínic de la ciudad condal. Trabaja en el Hospital del Mar desde el 2006. Los tumores cerebrales malignos, el dolor y la enfermedad mental son las áreas que más le han atraído siempre. Ha sido pionera tanto en Cataluña como en el resto de España en aplicar cirugías de neuromodulación cerebral, que han conseguido paliar las dolencias de