Consecuencias de la brecha digital.
En todas las revoluciones industriales y tecnológicas se producen una serie de cambios sociales que afectan a la población.
La (r)evolución tecnológica siempre lleva aparejado modificaciones en las formas de producción y los tipos de trabajo.
Podemos ver que determinadas empresas demandan puestos de trabajo especializados en Inteligencia Artificial, Ciberseguridad o Datos. Por eso hay que adaptar continuamente los estudios relacionados con la Tecnología, para que vayan acordes a las necesidades empresariales.
La brecha digital es provocada por la necesaria y progresiva adaptación de la sociedad a los cambios tecnológicos que se producen. En determinados grupos de población no hay acceso a Internet, no saben utilizarlo de forma correcta o no le sacan todo el potencial.
Suele ser más rápida la evolución de la tecnología que la capacidad de adaptación de los ciudadanos, empresas y organismos públicos.
Los derechos (y obligaciones) de los ciudadanos es otro punto a tener en cuenta, con la Justicia como garante mediante su legislación. También han de quedar claras las obligaciones de los ciudadanos para custodiar de forma adecuada sus dispositivos, claves y accesos, así como su relación com Administraciones y empresas.
La brecha digital se lleva produciendo desde hace décadas, aunque con la implantación de la inteligencia artificial , la popularización de los dispositivos electrónicos y la digitalización de empresas y administración, los ciudadanos deben ser más precavidos y estar informados de los riesgos.
También hemos de contar con la población mayor, que está atrapada en un «mundo paralelo» que no conoce, que le resulta extraño.
Aunque se haga partícipes a los mayores en el desarrollo tecnológico, evitemos que a las dificultades propias de la edad se le sume que pierdan su propia identidad y sus costumbres.