Triangulo de Amor Bizarro y su Tarot
Por David Farré
Iba de camino a la Razzmatazz 2 con las manos en los bolsillos y con mis airpods a tope; sonaba esa canción que deseaba poder oir en directo, esa que dice:
“Llévame en volandas al lugar donde nos conocimos
Para invocar sobre las marcas de mis dedos
En la tierra sin montañas ni precipicios
Donde lo que fue y lo que pudo ser se difuminan”
“Barca quemada” es el título de la canción. En cualquier otro concierto de los TAB habría sonado, pero en su gira de 20 años A Moura y su Tarot eran los encargados de escoger cuáles de los dos discos de los seis de la banda sonarían esa noche en Barcelona. Mis preferencias eran claras, aunque a lo mejor unos meses antes hubieran sido distintas, Triángulo de Amor Bizarro (2007) y Salve discordia (2016).
La Razzmatazz 2 presenta una buena entrada, no ha llegado el sold out, pero los presentes tienen ganas y muchas ganas de TAB. Las 21.00, puntualidad gallega, el trío sobre el escenario (Isa a la voz y bajo, Rodrigo voz, guitarra y teclados y Rafa a la batería), A Moura saca la primera carta, será el quinto álbum de la banda “Triángulo de amor bizarro”, sacado durante la pandemia.
Era mi primero concierto de TAB y sinceramente aluciné con su energía. Una cosa es lo que escuchas en el coche de camino a ese sitio soñado, en tus AirPods de camino a un concierto y una cosa muy distinta es lo que esa banda puede trasmitir en directo, a veces se te viene abajo esa idolatración, otras, como hoy, empiezas a venerarlos.
Sonaron en ese primer acto temas como “Ruptura”, “No eres tú”, “Vigilantes del espejo” con la que el público se vino arriba y empezaron los primeros pogos, “Canción de la fama” y llegó el momento de “Asmr para ti”, esa canción enigmática que me recuerda a los mejores The Cure.
A Moura sacó su segunda carta del Tarot, una bendición para mí, sonaría Salve Misericordia, sonaría “Barca quemada”, posiblemente la canción más popera del grupo. Continuaron temas como “Seguidores”, “Cómo encontró a la Diosa”, “Qué hizo por ella cuando la encontró”, “Salve Eris”, …
Aquí nadie se va del escenario, el típico me voy, pero en nada vuelvo para los bis, no es una opción para los TAB en esta gira, cosa que a uno le hace gracia, para que interrumpir ese éxtasis entre grupo y público, para que fingir … Con temas como “El fantasma de la transición”, “Robo tu tiempo”, … Para despedirse con una cómplice sonrisa mientras de fondo suena “A cantiga de Juan C”.
Quién busque un directo como mandan los cánones, el de TAB no se lo puede perder. Quién busque arriesgar, que se lleva a A Moura de gira, preparar todos los temas de una banda no es fácil, pero lo hace especial, nadie sabe que sonará y eso tiene su riesgo, pero también tiene su gracia. Felicidades por un concierto que no será fácil de olvidar.