Nina y el misterio de la tortuga: creación mexicana en Madrid
Horacio Otheguy Riveira.
Una actriz sin edad, adulta, eso sí, pero sin edad, como es natural en las buenas actrices que van ganando terreno al tiempo de la gente corriente. El escenario es un hábitat de excepcionales posibilidades. El cuerpo flexible, la expresión versátil, las voces de niños y adultos, de personajes influyentes o al paso de una experiencia callejera divertida o dolorosa —según qué momentos—, hace de Andrómeda Mejía una creadora que atraviesa Ciudad de México convertida en niña de 14 años empeñada en que no la vayan a adoptar en el orfanato en que ha crecido.
Para que Lucha Libre (tal y como llaman a la máxima celadora de la institución) no la entregue a los que se empeñan en ser padres adoptivos de una chica tan mayor, se porta muy mal, chilla y pega a un menor discapacitado. Una bronca que la conduce a una alianza con el pequeño víctima de su ira, que habla y piensa con dificultad, pero que esgrime un torrente de imaginación y valentía que vendrá bien a Nina en la huida… ya como amigo inseparable. Juntos salen a la gran ciudad, una fuga temeraria por un laberinto de calles desconocidas, oscuro y luminoso a partes iguales. Así, la joven se aleja de cualquier adopción que le impida volver a los brazos de su madre, que es el sueño de su corta vida.
De allí el gran escape que se produce en escena con una actriz a cargo de todos los personajes en un viaje emocionante que —en salas de tamaño diverso— va recorriendo México, y lo ha presentado en España el 23 de noviembre en el Corral de Comedias de Alcalá de Henares. Próximamente reaparecerá el 15 de diciembre a las 12 del mediodía en la Casa de México en Madrid.
El músico Mario Salas de Rueda, siempre en escena, interactúa con Andrómeda Mejía; a cargo de ambos se expande un universo emocional donde la experiencia teatral lo abarca todo a golpe de imaginación y creatividad: una mano en la nuca ya es suficiente para componer a la madre una vez que la encuentra, y con ello una decepción que conduce a una tragedia que, sin embargo, revela un acontecimiento esperanzador.
Vida y soledad, violencia de macarras y una desconocida que tiende la mano… de todo sucede por la calle. De todo un poco y mucho en los susurros y gritos de la gran ciudad que parece estar a punto de «comerse» a los niños, pero que será capaz de ofrecerles inesperados cobijos.
Nina y el misterio de la tortuga, arranca como cuento de hadas y acaba como cuento de puros humanos que en lugar de castigar, o matar con indiferencia, son capaces de abrazos impensados.
Un espectáculo muy atractivo en el que el cariz mexicano compite con el castellano limpiamente, para bien de todos y mal de ninguno. Con el talento por bandera.
CORRAL DE COMEDIAS DE ALCALÁ DE HENARES 23 DE NOVIEMBRE 2024