Pol Ibáñez rinde homenaje a Barcelona con ‘Cuando seamos sueños de papel’, un romance ambientado en Sant Jordi
PILAR M. MANZANARES.
El pasado 21 de febrero, llega a librerías la nueva novela de Pol Ibáñez: Cuando seamos sueños de papel (Crossbooks, 2024), una historia de amor entre dos jóvenes que se conocen el día de Sant Jordi en Barcelona. El autor catalán, que cuenta con una amplia y sólida comunidad digital (sólo en Instagram tiene 200.000 seguidores), cambia de género tras Volveré a verte y da el salto a la romántica contemporánea con esta novela inédita a través de la cual rinde homenaje a la ciudad que le vio crecer. Cabe mencionar que Volveré a verte se convirtió en un éxito rotundo en Wattpad con 1,6 millones de lecturas.
Pol Ibáñez (Barcelona, 2004) es un aficionado de la música, los atardeceres y los videojuegos. Estudia Ingeniería de Sistemas de Telecomunicación y empezó a escribir a sus doce años. A los quince decidió compartir su primera historia en Internet. A día de hoy es uno de los pocos talentos Wattpad masculinos que ha logrado el éxito en papel con Volveré a verte, un relato de superación frente al acoso escolar que escribió cuando tenía dieciocho años y que llegó al formato físico en 2023.
En 2024 publica Cuando seamos sueños de papel, una oda a Barcelona fresca y dirigida a todo tipo de lectores, en la línea de Inma Rubiales o Cherry Chic, referentes de la literatura juvenil en el ámbito nacional con historias de amor sanas.
- El autor
¿Y si el amor de tu vida está más cerca de lo que crees? Kei está desesperado. Se ha comprometido a trabajar en una parada de Sant Jordi con su madre. Odia los libros; para él solo son un montón de hojas de papel sin ningún sentido. Aidé sigue creyendo en aquellos sueños de papel de los que le habló su abuela. Le encanta perderse entre los puestos repletos de libros en un día tan especial para Barcelona, pero lo último que espera es encontrarse con un italiano engreído que vuelve a despertarle sentimientos enterrados en su piel. Kei y Aidé no están dispuestos a entenderse, pero el destino hará de las suyas y convertirá su historia en la más bonita de Sant Jordi.