España y el amor por los videojuegos: una relación sorprendentemente feliz
El mundo de los videojuegos ha permitido, desde su nacimiento junto con la expansión tecnológica, dar vida a historias fantásticas o, simplemente, generar una conexión con el público en relación con una estructura real que puede volverse simulativa. Es un medio tecnológico y mediático de gran relevancia que, quizás, aún no ha sido comprendido o percibido correctamente en algunos países del mundo.
Sin embargo, España ciertamente es una excepción. Históricamente una cuna rica en arte y cultura, España se confirma como un país muy receptivo a las perspectivas de los videojuegos. Sorprendentemente, es uno de los países donde la industria del gaming ha sabido prosperar con continuidad y relevancia. Un sector en crecimiento que, desde hace años, ha logrado generar ganancias y beneficios para las empresas que invierten en él dentro del país.
La industria del juego cuenta ahora con varias cartas en su manga. Por ejemplo, en la web y en la concepción en línea de esta diversión, ha habido un aumento significativo en los usuarios dispuestos a jugar a las tragaperras de los casinos virtuales, mediante promociones especiales o bonificaciones como las que se pueden encontrar en bonus-codes.com/es/. En cuanto a los videojuegos tradicionales, desde hace años los desarrolladores tienden a favorecer las competiciones en línea sobre los títulos centrados en el juego offline, que no permiten compartir la experiencia de un videojuego con otra persona, a menos que estén físicamente presentes.
El juego en línea ha generado aún más entusiasmo en España por este sector y los números, por supuesto, lo confirman.
Las cifras de la industria del gaming en España
Por ejemplo, en 2021 España tuvo más de 18 millones de usuarios que experimentaron videojuegos, con unas ganancias que superaron incluso los mil millones de euros. Las cifras en línea generaron, en particular, 913 millones de euros en ganancias, aunque con un 4,5% menos que en 2020. Esto es un síntoma de un crecimiento que, aunque enorme, aún no había alcanzado su punto máximo. En 2021, el 52% de los jugadores españoles eran hombres, con un sólido 48% para el género femenino. Estas cifras se han confirmado en gran medida también en los últimos años, con una atención aún mayor del público hacia los videojuegos.
La industria de los videojuegos en España funciona tan bien que en 2019 se propuso que se convirtieran en bienes culturales dentro de la Biblioteca Nacional de España. El país y los videojuegos avanzan juntos, no solo gracias al enorme seguimiento del público, sino también debido a los numerosos eventos generados por este sector. Uno de ellos es la Feria Internacional del Juego, que incluso en 2024 ofrecerá un nivel de asistencia muy alto tanto para expertos como para curiosos.
España y los videojuegos han generado una asociación destinada a durar mucho tiempo. Un amor sorprendente que parece no tener, al menos por ahora, una fecha de caducidad inminente.