‘La masacre olvidada’, un ejercicio de memoria histórica que rinde homenaje a los asesinados en 1848 en Sicilia
PILAR M. MANANARES.
«Adolf Eichmann, el responsable supremo de la “solución final”, no pudo ocultar, cuando lo juzgaron, una nota de orgullo en la voz: había trabajado a lo grande, a escala de millones, sin cometer un solo error desde el punto de vista logístico-organizativo, ni menos aún desde el punto de vista humano. Pero admitió que para planificar científicamente el exterminio de seis millones de personas había tenido que “sudar”».
Así arranca La masacre olvidada, una de las obras más especiales de Andrea Camilleri. Tras una exhaustiva documentación y partiendo de recuerdos transmitidos por su familia, el célebre autor siciliano revive, en una historia de humor amargo, la masacre de 1848 en Sicilia oscurecida por las autoridades e ignorada por los historiadores.
La masacre olvidada rescata esos nombres del olvido, rastrea a los asesinos y reconstruye los motivos. Nos recuerda, una vez más, que el relato que busca la verdad incómoda, trágica y humilde nos enseña mucho más sobre la vida que el de las lápidas o los libros.
Como afirmó el propio autor: «Me interesa que la segunda masacre, la de la memoria, sea redimida de alguna manera. Recordar los acontecimientos, recordar a estas personas es un pequeño acto hacia ellos, es una pequeña forma de recordar, de pedir disculpas». Inspirada en hechos reales, esta obra es un grandísimo homenaje a la defensa de la memoria histórica del fallecido maestro de la novela negra y creador del comisario Montalbano.
Una novela histórica sobre 114 cuerpos enterrados sin lápida. 114 nombres que perdieron la vida de la forma más terrible. 114 personas a las que ahora se les restituye su honor. Los ingredientes marca de la casa Camilleri están muy presentes: amor por el lenguaje, por la agilidad, los giros narrativos y un elenco muy amplio de personajes con muchas aristas.