Viajes y libros

Un manicomio en el fin del mundo

Un manicomio en el fin del mundo

La odisea del Belgica en la Antártida

Julian Sancton

Sinopsis

En agosto de 1897, el joven comandante belga Adrien de Gerlache partió para una expedición de tres años a bordo del barco Belgica con sueños de gloria hacia el extremo inexplorado de la Tierra: el continente helado de la Antártida. Pero sus planes se torcerían rápidamente. Tras varios contratiempos, el comandante se enfrentó a un dilema entre dos malas opciones: dar marcha atrás derrotado y evitar a sus hombres el devastador invierno antártico, o perseguir temerariamente la fama adentrándose en las gélidas aguas. De Gerlache siguió navegando, y pronto el barco quedó atrapado en las heladas aguas del mar de Bellingshausen. Cuando el sol se puso por última vez sobre el magnífico paisaje polar, los ocupantes del barco quedaron condenados a meses de noche interminable. En la oscuridad, acosados por una misteriosa enfermedad y asediados por la monotonía, descendieron a la locura. En Un manicomio en el fin del mundo, Julian Sancton despliega un relato épico de aventuras y horror.

Julian Sancton

3 junio, 1981 Nueva York (Estados Unidos)

Redactor en Vanity FairEsquire y The Holly-wood Reporter, Sancton ha escrito para publicaciones destacadas como The New YorkerWired y Playboy. Ha realizado reportajes en todos los continentes, incluida la Antártida, que visitó por primera vez mientras investigaba para este libro. Vive en Larchmont, Nueva York, con su pareja, Jessica, y sus dos hijas. Sancton se topó con la historia de Un manicomio en el fin del mundo, su primer libro, al leer un artículo del New Yorker publicado hace siete años. Se trataba de los planes de la NASA para una misión tripulada a Marte y de los estudios que habían realizado sobre el efecto que el confinamiento y el aislamiento prolongados en circunstancias extremas podían tener en los astronautas. Parte del trasfondo de la historia mencionaba esta expedición polar de 1897 en la que todo lo que podía salir mal salió mal. Sancton se puso manos a la obra. Resultó ser una de las expediciones mejor documentadas de la época heroica. De los diecinueve hombres que partieron de Sudamérica a bordo del Belgica, once escribieron algún tipo de relato cotidiano de primera mano. Era el sueño de cualquier historiador. Estuvo investigando varios años en los que viajó a Bélgica y la Antártida. Un manicomio en el fin del mundo explora los efectos mortíferos y desgarradores que pueden tener el confinamiento y el miedo.

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