Única función con excepcionales voces en el día de la Virgen de la Paloma
Horacio Otheguy Riveira.
Un día señalado cada 15 de agosto, bajo un calor que aísla y sin embargo flota por las calles y los callejones de La Latina y Lavapiés la esperanza de un nuevo mundo, uno hecho de pequeños y grandes milagros, acompañados siempre de canciones y melodías que se estrenaron hace mucho tiempo, pero nunca dejan de seguir nuestros pasos. Calor intenso sin importancia a la hora de formar largas colas para pillar entradas en el casi centenario Teatro Pavón (98 años ya), hasta llenar sus 625 butacas, vibrante de emociones, pues los más veteranos espectadores se abandonaban a los mágicos acordes de la gran orquesta del maestro Carlos Díez tarareando cada uno de los temas, en muchos casos presenciados en algunas de las revistas que en este teatro se presentaron, tales como Las Leandras…
Por la calle de la zarzuela apostó con firmeza por rendir homenaje también al género chico (breves sainetes musicales) y la revista, en todos los géneros creaciones musicales de compositores que ya son leyenda española y universal de armonía, buen humor, romanticismo, añoranza de tiernos mundos olvidados. Léase Chapí, Moreno Torroba, Chueca, Bretón, Sorozábal, Barbieri, Vives…
Una noche prolífica en aciertos deleitándonos con su arte destacados intérpretes como Guiomar Cantó, Rocío Faus, Eliza Lizama, Mónica Redondo, Andrés Sánchez Joglar, Ángel Treviño, Víctor Trueba y Ángel Walter. Además, de la colaboración especial de tres de las voces más reconocidas del género, los renombrados cantantes José Julián Frontal, Milagros Martín y María Rodríguez, quienes enriquecerán la velada con su generoso dominio creativo.
La soprano Eva Marco ejerce labores de producción junto a sus socios Alberto Frías y Guiomar Cantó (SingUs).
El espectáculo contó con una orquesta y coro en directo con dirección del maestro Carlos Díez, cuya maestría en la interpretación musical elevará aún más la magia de una puesta en escena cuyo vestuario no reparó en imaginación y alta costura, todo en manos de una brillante dirección artística a cargo de Alberto Frías, artista total del mundo del teatro cuyo último trabajo como actor cantante fue The Clown, admirable tributo al mundo del circo y el cabaret. Un creador, experto en resaltar la esencia y la emoción detrás de cada melodía.
Dos horas y media con varios bises entre los cuales destacó el Madrid del mexicano Agustín Lara, quien coronó de gloria la tendencia «natural» de la Villa abierta con generosidad a todas las nacionalidades:
Madrid Madrid Madrid
En México se piensa mucho en ti
Por el sabor que tienen tus verbenas
Por tantas buenas que soñamos desde aquí
Y vas a ver lo que es canela fina
Y armar la tremolina cuando llegues a Madrid.
Está muy bien poner en valor nuestro género chico, pero hay que pagar a los artistas aunque sea benéfico. No unos euros en concepto de gasto y sin que se entere la SGAE. Hay que dar de alta en la Seguridad Social a los profesores. En fin, esos detalles que diferencia las chapuzas y el hacer bien las cosas.