Cayetana Guillén Cuervo en «Pandataria», una isla donde la marginación se transforma en ensueño
Horacio Otheguy Riveira.
Chevi Muraday con su Compañía Losdedae, debuta en Mérida tras 27 años de trayectoria, y lo hace fiel a su estilo de gran libertad creativa donde diversas artes escénicas confluyen en un halo de danza contemporánea que estimula el espíritu crítico, moviliza los conceptos habituales sobre la estética y la dinámica teatral. Así, Pandataria es una obra de gran intensidad plástica y musical para enarbolar un grito de esperanza hacia la diversidad y el amor.
A partir de datos históricos, un espectáculo atemporal que fluye como agua de manantial, proponiendo un vigoroso viaje hacia un lugar duro y oscuro, en algunos momentos, pero que también tiene un residuo de mucho placer. Es el encuentro con el otro, es un lugar lleno de poesía, lleno de metáforas y de magia y de imágenes de hipnótica belleza. Una vibrante aventura de una fascinante sensualidad por la que circulan cuerpos cuya belleza desafía el tiempo y el espacio.
Pandataria es una isla perteneciente al archipiélago de las Pontinas, mar Tirreno y mide 1,54 km2.
En la época de la dinastía Julio-Claudia, las mujeres del imperio que no se adecuaban a las normas eran exiliadas a Pandataria para lavar la imagen de la autoridad. Julia la Mayor fue la primera y tras ella su hija y su nieta en distintos momentos de su vida. La vida en el exilio en una isla tan pequeña y sin posibilidad de salir podía llegar a ser muy asfixiante. Pero Pandataria como isla-prisión, llegó a representar el paraíso de los olvidados.
Tras el imperio romano, en 1941, tres hombres de apellidos Spinelli, Rossi y Colorni, acabaron en la misma isla-prisión bajo las órdenes de Mussolini. Habían puesto en duda la llegada al poder del dictador y fueron exiliados a Pandataria, que ya había cambiado de nombre a Ventotene. Allí, tras las huellas de Julia la Mayor y sus descendientes, ellos encontraron su propio paraíso y redactaron el texto que sería el caldo de cultivo de la Europa que conocemos hoy en día; el manifiesto de Ventotene, cuyo título completo es “Por una Europa libre y unida”. Y es curioso que en un kilómetro cuadrado rodeado del mar Tirreno, con unas fronteras tanto físicas como ideológicas infranqueables, los tres hombres soñaran con eliminar toda frontera del continente.
Y eso es Pandataria: la isla-prisión, la isla del marginado, del que no forma parte de la norma, del que viene del lote defectuoso, del que no es un ciudadano legal, la isla de los que sobran, de los que tambalean el mundo, de los que no son válidos. No hay manual de instrucciones para saber quiénes son válidos y quienes no lo son, pero sabemos reconocer la transgresión y la apartamos, la encerramos en una isla de un kilómetro cuadrado por miedo a lo diferente.
… la isla de los que sobran, de los que tambalean el mundo…
REPARTO: Cayetana Guillén Cuervo, Chevi Muraday, Elio Toffana, Basem
Nahnouh, La Merce, Chus Western
Dirección y coreografía: Chevi Muraday
Dirección de escena: David Picazo
Textos: Laila Ripoll
Diseño de iluminación: Nicolás Fischtel AAI
Diseño de escenografía: Chevi Muraday y Mambo Decorados
Intervención del espacio escénico: Okuda San Miguel
Música original: Mariano Marín
Diseño de vestuario: Eudald Magri
Fotografía: Damián Comendador
Diseño de cartel: Damián Comendador y María Muraday
Repetidora: Verónica Toro
Dirección técnica: Pepe Vázquez
Asistente de dirección y producción: Vicky Mendizábal
Producción ejecutiva: Isabel Romero de León COART+E
Diseño de producción: Gachi Pisani
Fotos de escena: Jero Morales
Una producción de Losdedae en colaboración con el Festival de Mérida