Eva García Saén de Urturi: «No me gusta lo gore, la violencia explícita ni las escenas incómodas»

HÉCTOR PEÑA MANTEROLA.

Eva García Sáenz de Urturi (Vitoria) publicó en 2012 su primera novela, La saga de los longevos, un fenómeno de crítica y ventas, y en 2014, la segunda entrega, Los hijos de Adán, junto con la novela histórica Pasaje a Tahití.

En 2016 publica El Silencio de la Ciudad Blanca, un thriller apasionante ambientado en su ciudad natal que ha supuesto un gran éxito en nuestro país y ha sido traducido a más de una veintena de idiomas, copando la lista de los más vendidos en países como Estados Unidos, Francia, Alemania, Italia, Polonia, México, Argentina o Brasil. También fue objeto de una adaptación cinematográfica en 2019 de la mano de Atresmedia.

Con esta novela arrancó una trilogía, de la que Los ritos del agua fue la segunda entrega y Los señores del tiempo la tercera y el desenlace de la Trilogía de la Ciudad Blanca.

Ha sido galardonada con prestigiosos premios, como el Libro de Ficción del Año en 2018 y The Golden Bullet a la mejor novela negra extranjera de 2019.

Tras ganar el Premio Planeta 2020 con Aquitania, publicó El Libro Negro de las Horas, que ha sido la novela más vendida en castellano de 2022. Ahora llega El Ángel de la Ciudad, su novena novela, que esperan sus más de 3 millones de lectores en todo el mundo.

• Buenos días. Más de tres millones de lectores, que se dice poco. ¿Qué se siente al abrir un procesador de textos y enfrentarte a la página en blanco decidida a comenzar una nueva historia, cuando sabes que detrás de cada palabra aguarda tanta gente?

Para mí lo importante es disfrutar escribiendo, así que me abstraigo del mundo exterior y me centro en el proceso de escribir y dar a luz un universo particular.

• Esta entrevista quizá se salga de lo convencional. Tengo que avisar. Como lector, me intereso por el vínculo emocional entre el autor y su obra. Usted estuvo en Venecia a los veintitantos, como indica al final del libro. ¿Cuánto hay de los ojos de aquella Eva en la belleza que Ítaca encuentra en la ciudad, y que la obliga a tomar la decisión que toma?

EG.-Dicen que la belleza del paisaje está en los ojos que quien lo mira. En ese sentido, le presté a Ítaca la visión de una Venecia al margen del turismo, la ciudad recorrida por los venecianos y sus tradiciones orales. El arte estaba tras cada esquina, era fácil dejarse hipnotizar.

• Con la lectura de la obra he tenido la impresión de que el villano, Calibán, cede su importancia al propio Misterio, con mayúscula. Página a página, siguiendo ambos puntos de vista, nos enfrentamos a un entramado de misterios menores superpuestos que poco a poco van formando la trama y que Unai va desenredando, penetrando en algo mucho más importante que un caso, que es su propia vida. ¿Esto es deliberado? Cuando escribes una novela (y ya tienes unas cuantas en tu haber), ¿le das más importancia a la trama en sí o a la psicología y desarrollo de los personajes?

La trama es el hilo de Ariadna, la melodía del flautista de Hamelin, el subterfugio que usas para que la persona que te lee se adentre en el mundo que le has creado y no desee escapar, pero las novelas son sus personajes, lo demás es escenario. El arco del personaje es el verdadero viaje, y es el único motivo por el que la lectora o el lector terminan la novela. En ese sentido, dedico mucho tiempo a conocerlos y crearlos, a saber su miedo más profundo, la mentira que se cuentan, la herida que no han cerrado. De eso tratan todas las buenas novelas.

• Después de recorrer Venecia, la cual nos entra por el ojo con cierto jinete que da título a la obra, ¿qué nos espera? ¿Dónde arrojará el destino a Kraken?

Estoy acostumbrada a que en todas las entrevistas me pregunten, además de por la novela que acabo de publicar, por la próxima novela. Vivimos en la era de la inmediatez, y lo queremos todo y lo queremos ya, pero en la vida real eso es simplemente imposible. Más que preguntar por una novela que todavía no existe, siempre pienso en las novelas anteriores. En mi caso, he escrito nueve, y es una pena que, con cada nuevo lanzamiento, las anteriores dejen de existir, pese a que continúen siendo las favoritas de millones de personas, como las novelas de los longevos, “Aquitania,” o “El silencio de la ciudad blanca” o “El libro negro de las horas”.

• He leído por ahí que para escribir Aquitania, novela galardonada con el Premio Planeta, durmió en la abadía donde Leonor vivió sus últimos años. ¿Cómo influye el sentimiento que le transmite un lugar en el enfoque final de la obra?

Los viajes de documentación a los escenarios son una parte fundamental de mi trabajo creativo. Cada ciudad, cada lugar, tiene una energía diferente, y hasta que no pasas unos cuantos días no te impregnas del tono que le vas a dar a la novela. Para mí me sirve de disparador creativo porque me ayuda a reproducir los cinco sentidos en el papel en blanco, me llevo los olores, los ruidos y el tacto de los edificios, la humedad de las madrugadas y los cambios de iluminación en el crepúsculo. En Venecia, por ejemplo, parece que han construido las fachadas de los palazzos pensando sólo en que destaquen en la hora naranja, esos minutos del atardecer que los fotógrafos adoran. La ciudad luce con un dorado casi sobrenatural, y si no estás ahí, los libros de documentación no te lo cuentan.

• Entre nuestros lectores hay muchos escritores. ¿Qué consejo les daría?

La escritura como oficio tiene mucho de artesanía, en el sentido de que hay que ser aprendiz, oficial y después maestro. Para llegar ahí no hay más camino que escribir novelas, una tras otra, para ir aprendiendo cómo solventar los escollos de la trama, las carencias de los personajes, los problemas con el ritmo. La práctica de años aporta la ansiada maestría.

• La saga de los longevos transcurre en mi tierra, Cantabria, así que esta es una pregunta un poco personal. ¿Ha pensado volver a escribir una novela ambientada aquí?

Ambienté “La saga de los longevos”, “Los hijos de Adán” y “Los ritos del agua” en la tierruca, adoro Cantabria y la tercera de los longevos también tendrá sus escenarios cántabros.

• Me gustaría que nuestros lectores conociesen un poco más a la mujer que habita tras la autora. ¿Cómo han evolucionado sus gustos literarios con el tiempo?

Siempre he sido una lectora omnívora, leo muchos géneros y leo a diario, así que hoy tengo mi listado de libros favoritos y dentro de un año tendré, con suerte, otro listado diferente.

• ¿Cuáles son tus líneas rojas a la hora de escribir o de leer?

No me gusta lo gore, la violencia explícita ni las escenas incómodas.

• Creo que ya te he robado mucho tiempo. Como lector privilegiado de El Ángel de la Ciudad, no puedo sino recomendársela a la comunidad, unida a las novelas previas de la Serie Kraken. Ha sido un placer entrevistarte. ¿Te gustaría añadir algo más o lanzar un mensaje a los lectores?

Estoy encantada de formar parte del universo de Culturamas y os agradezco la labor que hacéis por mantener viva la lectura.