“El Gliptodonte”, de Jaime Siles
Por Isabel Alamar.
El Gliptodonte, editado con sumo cuidado y delicadeza por Iglú, desprende un gran aroma a cultura, no en vano, ha sido escrito por un gran maestro de la Literatura como es el Catedrático de Filología Latina, Jaime Siles, y viene ilustrado por unos dibujos, casi transparentes y de grandísima calidad, de Paula Alenda.
Los poemas de Siles buscan sobre todo que los más pequeños se emocionen y se acerquen, entusiasmados, al mundo de la cultura, y que, además, la vivan y la hagan suya desde bien pequeños. El poeta desea con su poesía avivar su imaginación y sus ansias de saberlo todo. Intenta -y lo consigue- que activen, aún más si cabe, sus interminables e innatos porqués, y ese cometido queda patente en estrofas como las siguientes: “Mira el río que te mira / mirando solo mirar. / Es un río: está en el mapa / y lo tienes que encontrar. // El mundo son los colores, / la selva, la tierra y el mar. / El mundo es todo aquello / que tienes que descifrar.”
Conforme vayamos avanzando en la lectura del libro y viviendo sus historias, nos daremos cuenta de que este escritor es un defensor a ultranza del aprendizaje continuo tanto en casa como en la escuela como en la calle, y especialmente en espacios públicos como los museos. De hecho, un animal prehistórico, el gliptodonte, será el encargado de abrir, tras el prólogo, este ameno poemario: “El gliptodonte, sí, el gliptodonte / del Museo de Historia Natural / sale todas las noches de su jaula / de años, de madera y de cristal. // Por las noches él corre por los parques / y su redonda coraza de coral / refleja los anuncios luminosos / de otro tiempo, otra vida y otra edad. // El gliptodonte, sí el gliptodonte / del Museo de Historia Natural / necesita que vayas los domingos / con tu amigo, tu hermano y tu papá. // Te contará la historia de los días / cuando el mundo era lava y el volcán / movía las montañas, y la Tierra / era una estrella aún sin enfriar”.
En El Gliptodonte hallaremos que su estructura está formada por un poema que ejerce como prólogo y 37 poemas dedicados a los animales, unos 22 ya antiguos y 7 de nueva creación, ya que este poemario vio la luz por primera vez en 1990 dentro de la colección Austral Juvenil de Espasa Calpe, y ahora, 31 años más tarde, vive una versión revisada y ampliada bajo el sello Iglú.
De cada animal, el autor nos proporcionará unas descripciones frescas, no exentas de originalidad y humor, y nos narrará con un lenguaje vívido y sencillo cómo son algunas de sus aventuras. Un ejemplo perfecto lo hallamos en estos versos pertenecientes al soneto de “El Rinoceronte”: “Duro como la piel lunar del monte / protegida por una capa dura, / acorazado en su vestidura, / embiste, fiero, contra el horizonte”.
Esta colección de poemas infantiles está llena de pequeñas descripciones didácticas y cuenta con un aluvión de datos curiosos capaces de aunar realidad y fantasía al mismo tiempo: “El cocodrilo en el Nilo / y, en el Ganges, el gavial (…) Buscan el baño y el barro (…) // Aprenden las matemáticas, //que es el modo de contar / los dientes que hay en tu boca / de nieve o zinc o coral. Lo volvemos también claramente de nuevo en el siguiente poema titulado “El avestruz”: “Vive en África y Arabia / y en América del Sur, / donde es más flaca y pequeña / y la llaman el ñandú”. Y, respecto al elefante, podremos leer: “Come hojas de los árboles, / tiene memoria erudita / sabe contar hasta ocho / y multiplica deprisa”. Como vemos, son versos muy sonoros que utilizan formas métricas muy variadas como el soneto o el romance o recursos como la rima o repeticiones para hacernos llegar un mensaje que no es otro que el de que los niños no se cansen nunca de aprender y de querer saber cada vez más.
En suma, un poemario lleno de vitalidad, belleza, emoción y musicalidad que divertirá por igual a padres e hijos. Una obra con animalitos y mucho colorido e imaginación. Ideal para disfrutar en familia e incluso ser leído en voz alta. Para ello hay que hacerle caso al prólogo y aceptar la invitación que en él nos hace su autor: “Te invito hoy a un viaje // navegación, abordaje / al mundo de la emoción”.
El Gliptodonte
Jaime Siles
Ilustraciones De Paula Alenda
63 Páginas
Iglú, 2022