Octavi Pujades publica su primer libro, ‘No viene a cuento’
PILAR M. MANZANARES.
«Hace casi dos años (cómo pasa el tiempo) la gente de la Editorial Planeta se puso en contacto conmigo. Al parecer, les había hecho gracia mi forma de contar mi día a día en las redes durante la pandemia, y los muy insensatos me creyeron capaz de escribir un libro. Yo, que tengo cierta tendencia a morder más de lo que puedo tragar, les dije que sí sin pensármelo dos veces. — ¿De qué queréis que hable? — les pregunté. — Pues de lo que escribes habitualmente — respondieron —. De la familia, los hijos, la relación con tu padre, con tu chica… En tu tono habitual, con ternura y sentido del humor. Y yo, halagado, les dije que sin problema y que me ponía manos a la obra».
Así como cuenta el autor en las primeras páginas de este libro, es como nació No viene a cuento, el primer libro de Octavi Pujades, actor de merecida popularidad en España tras más de media vida entre escenarios y proyectos televisivos. Fue durante el confinamiento que su fama dio el salto también a Instagram, la particular ventana desde la que fue mostrando su rutina, volcada en el cuidado a su padre, con quien demostró tener una relación de lo más cómplice y emotiva hasta su fallecimiento el pasado mes de febrero, y también en la convivencia junto a sus hijos, Alicia y Jordi, y su pareja, la también actriz Anna Senan.
El universo de Pujades, expuesto con la cercanía, la sensibilidad y el humor irresistibles con que el autor ha definido su propio estilo narrativo, ha ido conquistando progresivamente a toda una comunidad que hoy no deja de crecer (+330k seguidores). Y es que no es para menos. Frente a la realidad maquillada que nos ofrecen habitualmente las redes sociales, Octavi Pujades se consagra como el máximo exponente del antipostureo más entrañable, compartiendo su vida sin florituras ni filtros innecesarios.
Elige hacernos partícipes de su día a día con una naturalidad y una ternura poco comunes en el medio digital. Su familia, su trabajo, sus renuncias y sacrificios, sus momentos más divertidos… Haciendo gala de una maravillosa generosidad, el actor ha encontrado otra manera, la suya, de llegar al corazón de una audiencia que ya le pertenece y a la que sabe mantener a su lado a base de repetirle el necesario mensaje que desprenden sus publicaciones: merece la pena vivir, y seguir.