De Sheherazade: la danza de una mujer que son todas las mujeres
Por Mariano Velasco
Interminables, los brazos de María Pagés surgen como dos serpientes en el desierto hipnotizadas por sensuales ritmos árabes. De Sheherazade, el espectáculo que la reciente Premio Princesa de Asturias de las Artes 2022 dirige junto a El Arbi El Harti, ahora en el 68 Festival de Teatro Clásico de Mérida, nos propone un mágico viaje de las arenas del desierto de Samarcanda al escenario de los tablaos andaluces, un recorrido que resulta bien fácil interpretar como símbolo de la evolución de nuestra cultura, visto todo ello, eso sí, bajo la imprescindible perspectiva y a través de los ojos, la palabra y el sentimiento de la verdadera protagonista de este sublime espectáculo: la mujer.
Soy una mujer.
Simplemente, una mujer.
Me llamo Sheherazade.
Una mujer que no es una mujer cualquiera, ni mucho menos, sino que quiere ser todas y cada una de las mujeres. Ello con la carga positiva y negativa que tienen los mitos, el mito de Sheherezade en este caso, aquella mujer que recurrió a la palabra para salvar su vida y que simboliza sometimiento y humillación, pero también valor, resiliencia y empoderamiento.
La noche de los ulemas
nace de un beso sin dilemas.
La luna escribe poemas
de limón y agua fresca.
Somos cielos y estrellas,
somos el viaje de las mareas.
En esta nueva y universal Sheherazade que ha creado María Pagés, la palabra se transmuta en danza, y esta se trasforma en lucha por la supervivencia. Una dura batalla que enseguida cobra forma en la sororidad que encierran las excelentes coreografías en las que el individuo se hace grupo. La primera de ellas, tal vez la menos flamenca de todas, la más impura en el mejor de los sentidos de la expresión, acierta, sorprende y fascina al saber incorporar toda esa fuerza tan característica de la danza urbana y el poderío de la percusión, hasta el punto de recordarnos danzas tan potentes como a las que nos tienen acostumbrados compañías como Mayumaná. Luego es cierto que la propuesta artística va derivando hacia estilos mucho más aflamencados y puros, también en el mejor de los sentidos de la expresión, pero sin perder en ningún momento ni una pizca de modernidad.
Imposible no dejarse llevar por la fortaleza visual y sensorial de un espectáculo que evidencia ante nuestros ojos cómo esas mujeres reales de carne y hueso se debaten entre la inseguridad y la firmeza, entre el amor y el desamor, entre el sometimiento y la libertad, entre el deseo y la maternidad, y cómo tal conflicto femenino se convierte en el verdadero y único motor del devenir de la humanidad.
Abuelas,
madres, hermanas,
hijas, esposas,
amantes,
alegres,
soñadoras…
Mujeres sabias…
Mujeres sabias a las que se van a sumar otros mitos y creaciones literarias universales fácilmente reconocibles. Ahí están Medea, Safo, Bernarda Alba, Carmen, Yerma… todo un desfile de figuras que complementan y magnifican el mito de Sheherazade haciéndolo si cabe más universal y que, como esta, también sufren y luchan para sobrevivir.
Malgasto mi vieja sangre
en la escuela de la vida.
Mujeres todas ellas, las míticas y las reales, que al fin, habiéndoles plantado cara al sufrimiento y a la vida, saldrán victoriosas de la batalla y tendrán arrestos aún para, empoderadas, darnos la espalda y retirarse mientras la luz, como sucede con el temor y la vergüenza, se difumina al ritmo más suave de la danza.
Deseo, esencia y sino.
Agua clara en el desierto.
Somos ríos en el camino.
De Sheherazade
ELENCO
Bailaora: María Pagés
Bailaoras: Júlia Gimeno, Marta Gálvez, Almudena Roca, Ariana López, Meritxell Rodríguez, Nerea Pinilla, Sofía Suárez, Yardén Amir, Marina González y Raquel Guillén
Cantaoras: Ana Ramón Muñoz, Cristina Pedrosa
Guitarra: Rubén Levaniegos
Guitarra: Isaac Muñoz
Violín: David Moñiz
Cello: Sergio Menem
Percusión: José María Uriarte
Dirección: María Pagés & El Arbi El Harti
Coreografía, diseño de vestuario, dirección musical: María Pagés
Dramaturgia, textos y letras: El Arbi El Harti
Composición Músical: Rubén Levaniegos, Sergio Menem, David Moñiz, María Pagés
Diseño de Iluminación: Olga Gacía
Escenografía: María Pagés y El Arbi El Harti
Teñido y realización de vestuario: María Calderón y Sandra Calderón
Coordinación Técnica e iluminación: Andrés Dwyer
Sonido: Enrique Cabañas
Regiduría: Andrés Martín, Alex Pintado
Producción: Almudena Cañete
Comunicación: Hasna El Harti
Fotos: David Ruano
Teatros del Canal de la Comunidad de Madrid. Hasta el domingo 26 de junio 2022
68 Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida 2022, del 29 al 31 DE JULIO