Los ‘Cuadernos de la Mancha: 53 tomos’

JESÚS MILLÁN MUÑOZ.

En su dimensión escrita, esta obra-título, Cuadernos de la Mancha, está formada por 53 tomos, 53.000 páginas, 22.000.000 palabras, una obra de literatura y filosofía y estética y metafísica.

Se han realizado autoediciones muy modestas, al equivalente a treinta y nueve tomos, aproximadamente 39.000 páginas, en su dimensión escrita. Porque esta obra, al ser como una especie de obra total, arte total, una obra que bajo un único título, un único autor, es una especie de catedral-rascacielos-palacio mental, está formada y conformada, con/por otras dimensiones-perspectivas: de arte plástico, de audios, de videos, de fotografías, etc. Y, entre todo conforman una especie de enorme laberinto de búsqueda de la realidad, especialmente, con cuatro grandes dimensiones-perspectivas-ópticas: filosóficas, literarias, metafísicas, arte plástico… Véase: https://museovirtualcuadernosdelamancha.wordpress.com

Una obra-título, de autoría y de creación y de búsqueda y de investigación, esencialmente, desde las perspectivas o saberes o disciplinas de la literatura, filosofía, metafísica, artes plásticas. Una obra tan ingente en cantidad, debe tener muchos errores de contenido, de forma, de sentido, por demasía o por exceso o por defecto, por limitaciones o por relaciones.

Pero es un intento de búsqueda desde distintos marcos cognoscitivos, saberes, disciplinas, de trozos de la realidad, tanto interior como exterior a la humanidad –humanidad, concepto, que para muchos, es solo un concepto irreal, una idea metafísica, pero analizando la historia, la humanidad o la totalidad de los humanos o la esencialidad de lo humano y de cada humano, es necesario, para que nuestra especie, nuestra especie humana pueda perdurar y continuar en este viaje por el mundo y el universo-.

No es una obra-título-libro-producto cultural, para la vanidad-soberbia-engreimiento-petulancia del escribiente-autor-pintor-pensante, sino que en el noventa y nueve por ciento, como todo producto cultural, quizás más, es tomado de docenas de tradiciones culturales, tanto orientales como occidentales, de ayer y de hoy, intentando que sea un edificio, que pueda servir y ayudar al ser humano. No es exactamente una enciclopedia, aunque trata multitud de temas y cuestiones y datos y argumentos, sino más bien, una mezcla de obra de creación e investigación, ambos mundos, unidos y relacionados, conformando una especie de sistema de sistemas.

Utilizando multitud de lenguajes y de géneros literarios y filosóficos, intenta indagar en la naturaleza del ser humano, de éste consigo mismo y con los otros, de la naturaleza social, de la naturaleza metafísica. No es un tratado sistemático, que una persona, hoy, no puede abordar, sino el tratamiento de cientos de cuestiones. Pero no es, ante un tema o pregunta o cuestión, ir describiendo todas las posiciones y posturas y soluciones que se han ido otorgando a lo largo de siglos o generaciones, y al final, dedicar diez páginas de doscientas, para una nueva respuesta. Sino es, tratar una cuestión, y, aportar una posible respuesta, nueva o innovadora, o ya dicha, hace siglos, pero intentar aportar una razón o un argumento o unos datos.

Desde la literatura se ha hecho filosofía, desde la filosofía literatura. No son textos que unos son literarios y otros filosóficos, sino que los literarios son literarios pero también filosóficos, los filosóficos son filosóficos pero también literarios. Es, un intento de combinación, de aceptar la metodología de las artes, literarias y artes plásticas, como lo que son, pero también, como sistemas y metodologías de indagación filosófica. El arte y las artes y la literatura y el arte plástico, como un método más de análisis filosófico… -Explicación que he indicado multitud de veces, en cartas privadas y en escritos públicos.

Dentro de los textos literarios-filosóficos, se han utilizado, según épocas, todos los géneros literarios y casi todos los filosóficos y metafísicos, además de los estéticos del arte plástico –y, otras dimensiones, de la totalidad, de lo que conforman esta producción cultural-. A semejanza, de una catedral, está formada y constituida y dentro de ella, existe/n, porque utilizan distintos  lenguajes y estructuras significativas y semánticas y estéticas y conceptuales: religiosidad, metafísica, literatura, arte plástico, arquitectura, plástica, etc. Pues esta obra, es una especie de “catedral mental”, con multitud de dimensiones, forma y conforma una unidad mental. No es algo físico, no es una catedral física, pero si es una catedral mental, compuesta por multitud de realidades conceptuales y cognoscitivas y lenguajes y estéticas.

Hasta dónde sé/sabemos y conozco/conocemos, incluso admitiendo, que una obra, tan ingente, tiene que tener enormes defectos y errores, de todas clases y propiedades. Incluso aceptando que tenga muchas deficiencias, hasta donde sabemos, no conocemos, que algo semejante a esta producción cultural exista, dentro de nuestro territorio, y lengua y cultura, ni fuera de ella, ni ahora, ni en el pasado.

¿La grave cuestión, es como una producción cultural de esta clase, reiterando, aunque tenga muchos defectos, realizada, durante más de cinco décadas, no exista en el panorama cultural de la sociedad en la que ha emergido y nacido y criado y florecido…?

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