‘La pandilla de los 11’, de Rocío Bonilla
Texto e ilustración: Rocío Bonilla
Editorial: Algar
ISBN: 9788491425601
220×300 mm, 43 páginas
16,95€ (+4 años)
Pasta dura, 2022
Por José R. Cortés Criado
“Porque las pandillas extraordinarias de verdad no necesitan dar miedo. Les basta con respetarse” Rocío Bonilla: La pandilla de los 11.
Otra simpática historia de Rocío Bonilla que nos presenta una singular pandilla, a la que llega Benjamín, el pequeño y tímido pececillo rojo. Hasta entonces disfrutaba comiendo algas y jugando al fútbol con sus amigos.
Todo cambió cuando apareció aquella pandilla de diez peces diferentes que se dirigió a Benjamín, al único pececillo que invitaron a sumarse a la pandilla. Nadie los conocía, pero su presencia era suficiente para que todos cesasen su actividad y prestasen atención a la panda.
El pececillo rojo se siente muy cómodo; no debe hacer nada, no debe decidir nada, no debe pensar, solo hacer lo que el líder mande. El grupo siempre consigue lo que se propone y atemoriza a los demás.
Con el paso de los días las bromas que gastaban esa pandilla no le resultaban tan divertidas a Benjamín y así se lo hizo saber al líder. No dudó ni temió represalias. Su actitud desencadenó otras deserciones y, al final, los amigos son amigos y nadie teme a nadie.
Simpática historia que hace reflexionar a los pequeños lectores en la necesidad de tener amigos de verdad y a la necesidad de enfrentarse a los abusones, porque el silencio es cómplice de abusos a los débiles y la unión de estos tiene más fuerza que cualquier pandilla.
Si el texto es original y ameno, las ilustraciones son de gran belleza y conforman la mitad del libro. Ver ese fondo marino con sus habitantes llevando actuaciones cotidianas como jugar al fútbol, embarcar la pelota en la concha de una gran ostra, disimular esta actuación que molesta a su vecina hacen que los lectores disfrutemos con los pequeños detalles que engrandecen cada lámina.
Las ilustraciones son tan expresivas que pueden ser leídas sin texto alguno y, seguro, que la trama la descubren y disfrutan todos los pequeños no lectores.