Rayden: «‘Amoratado’ nace de la diferencia que hay entre el amor que ata y el que enlaza»
PILAR M. MANZANARES.
David Martínez, más conocido como Rayden, es uno de los poetas urbanos, compositores e intérpretes más visibles y valorados en la actualidad en muchos y distintos ámbitos. Sin embargo, su relación con la escritura no se reduce a la composición de sus canciones y con Amoratado lo ha vuelto a demostrar. Tras su participación en el Benidorm Fest, el artista alcalaíno se atreve a publicar el poemario más personal de su carrera como escritor de la mano de Crossbooks.
- ¿Cuál es tu propósito con este libro ‘Amoratado’ ?
No tengo ningún propósito claro con el libro como tal. Es cierto que se ha ido haciendo hueco él solo, porque no estaba planificado escribirlo. Amoratado nace después de un momento en el que me voló la cabeza el concepto que surge al diferenciar entre el amor que ata y el que enlaza. Empecé a partir de ahí a enarbolar y el libro se abrió paso solo.
Estoy flipando con la buena acogida que está teniendo. No esperaba nada y ahora veo que está entre los más vendidos (risas). Se me hace raro. Yo soy muy maquiavelo en ese sentido, me gusta tenerlo todo muy marcado y este libro ha ido más allá de lo que pensaba para él.
- Es una de tus obras más personales, de las más biográficas emocionalmente hablando ¿Sigue dando vértigo desnudarse delante de las personas con estos textos?
Yo creo que uno ya se va acostumbrando a desnudarse ante las personas, por lo menos en mi caso. Exponerse de esta forma es dotar de verdad lo que uno escribe y eso el lector lo va a ver y también lo va a valorar. No me da vértigo y, mucho menos, pudor.
- Tu faceta como escritor no empieza aquí. De hecho, has publicados otros libros con anterioridad ¿Te sientes identificado con esos textos que sacaste a la luz hace años o ya no ves tu reflejo en ellos?
Soy una persona con suerte, porque, además de los poemarios, hace poco saqué un cancionero con las 100 canciones que había lanzado hasta la fecha y, para mi sorpresa, fue un placer encontrar que no había cambiado el discurso desde entonces hasta ahora. Que no había dado ningún volantazo.
En el caso de los poemarios me pasa exactamente igual. Si que es cierto que hay algunos que envejecen peor, porque vas cogiendo fluidez con el paso del tiempo y vas sabiendo afilar mejor los poemas. Hay algunos que no están cerrados como lo haría ahora, pero, la verdad, es que estoy muy orgulloso del trabajo hecho. Es más, en un momento dado me compartieron un poema que forma parte de mi primer poemario Herido diario y vi cosas muy chulas, observé un nivel que me gustaba.
- ¿Publicas todo lo que escribes o dejas la mayor parte en un cajón?
Me atrevería a decir que publico todo lo que escribo. Si veo que no puedo finalizarlo y darle la calidad que tiene que tener un escrito para sacarlo, pues no sigo. Si es cierto que, quizá, tengo esbozos por ahí guardados. Incluso cosas que le escribo a mi novia cuando estoy volando en un avión, ya sea en forma de poema o ensayo. Pero, salvos esos retales, publico todo.
- Eres una persona unida a la canción, a la escritura, en definitiva, al arte. Pero, si la vida no te hubiera llevado por este camino ¿Dónde crees que habrías terminado profesionalmente?
¡Lo tengo clarísimo! Hubiera sido profesor de educación física (risas). De hecho, me estaba formando para ello hasta que decidí centrarme por y para la música. Pero si, yo iba a ser el profesor de educación física de los hijas e hijas de muchos y muchas.
- Bien decías que este libro nace de diferenciar entre el amor que ata y el que enlaza ¿Qué opinas del amor romántico, muchas veces asemejado al tóxico?
Creo que hay que empezar a erosionar un poco el término tóxico. Es cierto que en el amor hay aspectos a trabajar, pero eso no quiere decir que sea tóxico. Por supuesto, muchas veces se disfraza de amor romántico a aquel sentimientos que lo vanagloria todo y que todo lo puede, que quien te quiere, te hará sufrir y ese tipo de cosas que no son para nada así.
Eso no tiene que ver con una relación descafeinada. Tú puedes tener un amor apasionado, increíble, a la francesa y hacerse bien el uno al otro, no proyectar todos esos sentimientos negativos. Y creo que Amoratado justamente habla de esto.
- Y esta teniendo muy buenas críticas por redes sociales. Estas son geniales si se usan bien, pero también son un pozo donde vomitar el odio o el descontento que uno siente hacia algunas personas ¿Has recibimos más críticas como cantante o cómo escritor?
Como cantante (risas). En el mundo de la canción, siempre que se destaca, si alguien no comulga con tu obra o no le representa, pues está en su derecho de dar su opinión. Luego hay que ver desde que punto nace esa crítica, por supuesto.
Si es cierto que como escritor me han podido llover ciertos comentarios negativos que proviene de gente de otros géneros, como la poesía más profunda, de gente que sabe escribir y parece que esas críticas son más certeras.
- ¿Y cuáles duelen más?
No suelen afectarme las críticas. Si es cierto, que en los albores de mi carrera, si les hacía más caso, pero ahora para nada. La última vez en la que me he podido sentir mal por comentarios de otros, fue cuando di el concierto en el Wizink (Madrid), porque, por el tema de la pandemia y la legislación de aquel momento, hubo que hacer cambios y la gente me culpaba a mí.
Ahí si me dolió lo que se decía, pero por impotencia, porque sentía que se me estaba cargando a mí algo en lo que yo no tenía que ver, pero entiendo la frustración, claro.
- Uno de los comentarios más repetidos por gente que te lleva escuchando desde tus inicios es que vuelvas a esos orígenes ¿Entiendes estas peticiones?
Yo entiendo de donde nacen esas opiniones. Creo que la gente habla así desde la nostalgia. Ellos y ellas piden la vuelta de los artistas a sus orígenes porque lo que quieren es sentirse de nuevo como lo hacían en esa época. Quieren que la música que escuchaban siga intacta por y para ellas. Y al final no es así, porque si hiciera caso a esas peticiones creo que entonces es cuando me estaría vendiendo, es decir, estaría deformando mi obra por intentar contentar.
- Volviendo a la literatura ¿De dónde viene esta relación tan estrecha que tienes con la escritura?
Porque era muy introvertido y llevar todo al papel me ayudaba mucho. Verbalizar las cosas me permitía primero supurar la herida. Ese momento era para mí una catarsis. Y también me ayudaba a comunicarme, aunque fuera conmigo mismo.
- Haciendo un homenaje a tu canción “A mi yo de ayer”, si tuvieras delante de ti al Rayden que empezó a coger la pluma y el papel ¿Qué le dirías?
Yo más que decir, le dejaría que viera todo lo que ha ido pasando y que me dijera que le parece. Porque creo que sería una forma de validarse a sí mismo y observar como ha ido su camino. Sería como una autoarenga (risas).
- Y del pasado, para terminar, nos vamos al futuro. Después del Benidorm fest y toda la resaca que ha dejado, ahora escribes ‘Amoratado’ ¿Cuál será tu próximo reto profesional?
Pues estoy terminando de escribir el nuevo disco que saldrá en diciembre de este año y a la vez estoy escribiendo, por primera vez, una novela. Una historia que tengo muchas ganas de que salga. Estoy bastante motivado con este proyecto y para mí es un nuevo reto que me encanta.