Entrevista a Ramón D. Veiga e Iván R.: pizza, moras y mucho glamour en una serie de cómics para pequeños lectores

Por Àngels S. Amorós

La editorial barcelonesa Takatuka ha publicado recientemente el cómic para pequeños lectores Lombriz y urraca, la segunda entrega de la serie Lombriz. Hace poco conversamos con los autores del texto, Ramón D. Veiga, y de las ilustraciones Iván R. En el mes de febrero publicamos la primera entrega Lombriz y conejo y la segunda entrega, Lombriz y urraca, se publicó el 2 de abril cuando se celebra el Día del Libro Infantil.

Ramón – Iván

No es la primera vez que trabajáis juntos en un proyecto literario para los más pequeños. Por ejemplo, en los libros A araña que lles tiña medo ás arañas, Meigas fóra y el cuento en línea #yomequedoencasa. ¿Cómo es la experiencia de trabajar juntos?

            R-Iván y yo somos amigos desde hace mucho tiempo y, la verdad, la experiencia es muy positiva. Normalmente le entrego un texto, él me hace una propuesta de estilo de ilustración que siempre me encaja a primera vista y luego vamos trabajando juntos en el proceso hasta que esté el libro terminado. Y si en algún momento tengo que cambiar el texto porque él me propone algo diferente, no tengo problema. Estoy seguro de que el resultado final será mejor.

            I- Creo que el valor de nuestra forma de trabajar juntos es la forma en la que cedemos, hay veces que por un tema de imagen le pido a Ramón ajustar el texto y al revés, mis ilustraciones las adapto a los cambios que Ramón me sugiere. Son visiones complementarias que ayudan a tener mejor resultado.

¿Es habitual que el autor del texto y el autor de las ilustraciones coincidan? Cuando esto ocurre es por decisión propia o a iniciativa de la editorial?

            R-Cuando entregas un texto a una editorial, lo más frecuente es que ellos decidan quién lo va a ilustrar. Sin embargo, nosotros solemos entregar propuestas conjuntas que ya hemos trabajado, incluso algunas terminadas y, por el momento, siempre las han aceptado. En mi opinión, cuando hay una buena relación entre autor e ilustrador, el resultado siempre es más redondo.

            I- En mi caso he tenido la suerte de trabajar con Ramón entregando propuestas conjuntas y otras por encargo para otros autores. Actualmente tenemos una propuesta en la que hemos empezado  a trabajar juntos pero esta vez por encargo de una editorial porque les ha gustado la idea de que trabajemos juntos para un libro.

Ramón

Recientemente se han publicado dos entregas protagonizadas por una lombriz que se presenta en formato cómic para los más pequeños cuando lo más habitual para estas edades es el libro álbum o álbum ilustrado. ¿Podrías razonar el por qué de tu elección?

Soy un gran lector de cómics y llevaba tiempo dándole vueltas a escribir un guión para uno. Cuando escogí una lombriz como protagonista y decidí que fuese parlanchina, simpática y también un poco sinvergüenza, pensé que este era el momento adecuado. Se lo propuse a Iván y no lo dudamos. Esa lombriz necesitaba hablar mucho, expresarse, y el formato cómic era el más adecuado para ella. El álbum ilustrado, por lo general, no tiene ese dinamismo que necesitábamos para nuestros personajes.

En todas tus obras el humor ocupa un espacio importante hasta tal punto que los protagonistas se cuentan chistes. ¿Qué importancia le das en las obras infantiles?

El humor es fundamental en una obra dirigida al público infantil. Los niños y las niñas necesitan divertirse, reír a carcajadas. También los adultos. El mundo ya tiene suficientes dramas como para complicárselo con la lectura.

En Lombriz y urraca, la protagonista explica la importancia de la lluvia en la vida de las lombrices. A pesar de ser un libro de ficción esta referencia didáctica encaja bien en el sentido de la historia. ¿Piensas que la literatura de ficción puede funcionar como puente hacia otras disciplinas?

Puede, pero no tiene por qué. Un libro tiene que entretener. Si con él puedes aprender algo, bien, pero si no, tampoco pasa nada. Para eso ya están los libros de texto y las cinco horas al día en el cole. Las referencias didácticas sobre el mundo de las lombrices que aparecen en los dos volúmenes son muy sencillas y están tratadas desde un punto de vista humorístico: enseñan, sí, pero quien da la lección es una lombriz “listilla” que se pone un poco pedante en un momento determinado.

Tanto en Lombriz y Conejo como en Lombriz y Urraca se habla de la superación de las diferencias, de los prejuicios además de la importancia de la comida: moras, pizza, etc. Parece que los malos tragos se pasan mejor con la barriga llena.

¡Siempre! Cuando se me ocurrió la idea de escribir una serie de cómics pensé: ¿Qué es lo que más les gusta a los niños y a las niñas? La pizza, por supuesto. Tanto Lombriz, como Conejo, y también Urraca, son como cualquiera de nosotros: tienen el mismo comportamiento que tendría un niño o una niña ante esas situaciones. De ahí que les guste la pizza… y la caca, aunque esa es otra historia ; )

Iván

En las dos entregas protagonizadas por Lombriz: Lombriz y conejo; Lombriz y urraca la protagonista es una lombriz con mucha verborrea y muy segura de sí misma que recuerda a una diva de Hollywood. ¿Ha sido complicado dotar de glamour a un bichejo tan simple como una lombriz?

El personaje es complejo para poder animar, carece de extremidades y solo tuve el apoyo de ojos boca y cejas para poder hacer las expresiones, me he apoyado principalmente en las cejas.

El libro combina diferentes colores del fondo que van del blanco hasta el verde, el azul, el amarillo, etc. ¿El uso variado del color tiene alguna función según el sentido de la historia o es aleatorio?

Me parecía interesante no crear fondos complejos que aportasen demasiada información detrás de los personajes para que pudiesen destacar sus expresiones y así ayudar mejor a la lectura ya que es un cómic para primeras lecturas. El color no tiene significado, los he ido cambiando para diferenciar cambios de escenarios, principalmente.

En las ilustraciones hay una especial atención respecto a representar las emociones de los personajes, el movimiento, etc. ¿Tu experiencia en ilustración de televisión y publicidad ha sido decisiva en este sentido?

He trabajado en diferentes espacios, diseñando personajes para series de televisión, publicidad etc. como comentas creo que eso puede ayudar no solo aportarles expresividad a los personajes, enriquece el trabajo en todos los sentidos. Creo que mi trabajo es el reflejo de todo lo hecho anteriormente, quizás veo más relación de la expresividad de los personajes con mi experiencia en trabajos para arte dramático que con la publicidad en la que prima la estética.

Ramón – Iván

Lombriz y Urraca es la segunda entrega de las andanzas de este personaje tan carismático, ¿habrá nuevas aventuras protagonizadas por este simpático animal?  ¿trabajaréis de nuevo juntos?

     R-¡Por supuesto! Lombriz es hija nuestra, de los dos, y, o la hacemos juntos o no la hacemos. De hecho, estamos trabajando ya en un tercer volumen en el que habrá personajes nuevos y recuperaremos a los anteriores.

          I-Lo que diga Ramón! Y los lectores y lectoras, claro! Yo estoy encantado de poder seguir con Lombriz.

¿Podríais comentar si tenéis algún otro proyecto –en común o en solitario- próximamente?

             R-Le he pasado ya a Iván varios originales para que vaya pensando, entre ellos, otro cómic (protagonizado por humanos y fantasmas famosos), un libro de poesía y un proyecto muy bonito sobre una de nuestras autoras favoritas. En cuando podamos, os informaremos. Además, acabamos de crear un cuento en línea que es nuestro particular “No a la guerra” y que estamos moviendo por redes, por grupos de Whatsapp… Se titula Bombas de chocolate. Ya habíamos hecho lo mismo hace un par de años, en pleno confinamiento, con #YoMeQuedoEnCasa y había funcionado muy bien, sobre todo en grupos de padres, madres y colegios, donde lo han leído y trabajado. Son iniciativas que nos encantan y que la gente agradece un montón.

      I- Aparte de lo que estoy haciendo con Ramón que ya os ha contado, en breve me estreno como autor total de un cuento escrito e ilustrado por mi: Los Winkle- Todo les importa un pimiento” una familia muy extravagante que vive obsesionada con su huerta y sus verduras. Estoy muy a gusto en el terreno editorial ahora mismo y, en parte es gracias al empuje de Ramón que siempre me anima a colaborar en sus textos!