‘Wonder Woman: hacia la tormenta’, la novela gráfica para promover un cambio social
REDACCIÓN.
La princesa de Themyscira se convierte en una refugiada en Wonder Woman: Hacia la tormenta, la nueva novela gráfica de Laurie Halse Anderson que habla sobre las condiciones de los refugiados, la trata infantil, el activismo adolescente y el crecimiento personal. En esta obra, una Diana de tan solo dieciséis años descubre que fuera de su hogar el mundo es un lugar mucho más oscuro de lo que podría haber imaginado.
A través de las páginas, la joven se enfrentará a la desigualdad y el racismo, pero también aprenderá sobre el valor del amor y la amistad. Desde un principio, la autora tuvo claro que quería que esta obra girase en torno a la amistad, por ello y como explicó en una entrevista con CBR, convirtió a Steve Trevor, el reconocido interés amoroso de Wonder Woman, en Steve y Trevor, una pareja que será de gran ayuda para la protagonista en Nueva York.
La idea que dio vida a Wonder Woman: Hacia la tormenta surgió cuando Laurie Halse Anderson vio la fotografía de una persona recogiendo un salvavidas de un bebé en una orilla. Tras ver esa imagen, que le resultó descorazonadora, decidió escribir una historia de ficción que contase con un contexto real. En una entrevista con Entertainment Weekly, explicó: «Pienso que es de vital importancia que el arte refleje la realidad, así es como avanzamos como cultura y podemos comenzar a cambiar las cosas».
La ilustración de Wonder Woman: Hacia la tormenta, realizada por Leila del Duca, cuenta con dos espacios muy diferenciados. Por un lado, Themyscira, un mundo fantástico y hermoso donde el arte prospera y la convivencia es prácticamente perfecta.
Por otro lado, y en contraste con la belleza etérea de Themyscira, se encuentra el mundo real donde Leila trató de transmitir la sensación de frialdad, el dolor y la tristeza que desprenden los campos de refugiados. Esta disparidad también se aprecia en la apariencia en los personajes. Para las amazonas, la ilustradora diseñó un vestuario inspirado en la antigua Grecia y la alta costura moderna. Sin embargo, en la Gran Manzana los jóvenes visten de forma acorde a su edad, con un estilo desenfadado y con mensajes de protesta.
Para Leila era muy importante que la diversidad y el realismo formasen parte de su trabajo, por eso decidió retratar una gran variedad de cuerpos en sus personajes. Como punto final, la colorista Kelly Fitzpatrick, utilizó una paleta donde predominan el verde y el azul en Themyscira y, los tonos tierra, el negro y el blanco en la ciudad, reforzando este marcado contraste entre los dos mundos.
En conclusión, Wonder Woman: Hacia la tormenta es una historia que, sirviéndose de una trama de superhéroes, busca ser un espejo de algunos de los problemas sociales más importantes de la actualidad. A través de los ojos de Diana, Laurie Halse Anderson intentó mostrar cuán cruel, insensible y dañino puede ser nuestro mundo, pero también quiso dar visibilidad a la labor que realizan gran cantidad de personas para intentar mejorarlo. La autora escribió una conmovedora novela gráfica que persigue no solo entretener al lector, sino lograr una reflexión por su parte una vez finalizada la obra.