Entrevista con Félix Bermúdez Maestre, autor de ‘La hija del viento’

PILAR M. MANZANARES.

La hija del viento, es la historia de la familia de Sabina. Todo comienza on su abuela, una sirvienta embarazada que elude su propio destino buscando cobijo en el matrimonio con un cacique machista y vanidoso. Su autor Félix Bérmudez Maestre, que busca editorial para su publicación, refleja de forma maravillosa el sistema patriarcal en el que las mujeres se han movido (y se mueven) durante décadas. La lucha de clases y el instinto de supervivencia de los más débiles frente al coloso que, a veces es la vida.

• ‘La hija del viento’ tiene nombre propio.

Sin encuadre temporal, la narración aporta un solo nombre propio, Sabina, la nieta que, con unos firmes valores de arraigo, es el contrapunto que la familia necesita para dejar atrás la ambición, el odio y la confrontación en los que está inmersa. Pero el destino, tal vez caprichoso, tal vez justiciero, impone su ley, llevándolos a un desenlace inesperado.

• ¿De dónde nace esta novela?

Nace de la imaginación. Es un proyecto que ha ido naciendo día a día. Según la escribía iban naciendo un nuevo personaje, o una nueva escena, hasta que poco a poco fue cogiendo cuerpo.

• ¿Qué hay de ti en ella?

Me identifico un poco con Sabina, por su tesón por unificar la familia y por dar nuevas oportunidades a las causas perdidas, y por conseguir lo que los demás consideran imposible.

• ¿Cómo fue el proceso? ¿Difícil?

Ha sido divertido, con mucho proceso de investigación, aunque al leerla no lo parezca: La madre de Sabina es esquizofrénica y no conocía nada de esa enfermedad. También, por ejemplo, a la hora de elegir los venenos (adelfa y cianuro) tuve que elegir entre varios tipos en relación con los efectos que quería que causasen. 

Por otra parte, te pasas todo el día pensando en la novela y, de repente, se muestran situaciones de la vida real, o en la lectura de un libro, que dan pie a una o varias escenas.

• ¿Qué crees que lector puede encontrar en ella para engancharse a su lectura?

En cuanto a la trama: En las tres generaciones de la familia pasan muchas cosas: el primer engaño con un embarazo, o la muerte de los hermanos de Espinacia, o su propia esquizofrenia y el juego que da, o los intentos de asesinato de Sabina y de su madre, o las idas venidas mentales del médico sobre si es o no el padre de Sabina… También el ir descubriendo la evolución de los personajes a lo largo de la historia.

En cuanto al texto: Ni nombres ni lugares ni fechas. En un espacio intemporal y en un lugar desconocido. Así se desarrolla la novela, destacando sobre el fondo dramático una actitud tenaz y prevalente del único personaje con nombre propio, Sabina.

La novela presenta en los primeros capítulos a sus personajes principales, permitiendo al lector un rápido conocimiento de los mismos que, a medio camino de la novela, unirán sus acciones, narradas ya en un mismo espacio de tiempo.

La lectura se hace fácil y amena, alternando la narración con las contribuciones personales de los personajes. El lector, inmerso en la trama, no percibe que no hay puntos y aparte ni que los diálogos están contenidos e integrados, a renglón seguido, ofreciendo unas transiciones agradables y formando un conjunto atractivo.

• ¿Cuál es tu personaje favorito de este libro?

Cada uno tiene algo especial, pero si he de elegir solo uno, creo que me quedaría con el médico, con sus idas y venidas mentales, y su inacción permanente, pero con un “lidiar permanente”, desde un segundo plano, con la madre de Sabina.

• ¿En algún momento pensaste en no terminar el libro? ¿Flaqueaste?

Cuando terminé el capítulo 17 estaba saturado y siempre escribía lo mismo. Tuve que dejar la novela apartada un tiempo, hasta que fluyó el capítulo 18, con un tinte de pseudo novela negra que cambió un poco el rumbo de los acontecimientos.

• ¿Qué es para ti la escritura?

Es placer y emoción. Es vida. Es una adicción en la que te ves inmerso y de la que no puedes desconectar. Es un medio de sacar de dentro de tí cosas que ni siquiera sabías que tenías. Aunque escribo para mí, cuando leen lo que he escrito y veo que gusta… Eso ya es insuperable.

• ¿Por qué está afición por escribir?

Siempre quise hacerlo. Me encanta todo lo que rodea a la escritura: darle vueltas a los personajes, imaginar una trama…

Pero tengo muchas aficiones y siempre me quedaba alguna descolgada por falta de tiempo. Así, en 2019, por problemas de salud, tuve que dejar muchas de ellas e inmediatamente tomé el ordenador y me puse a escribir. Desde entonces he escrito varios relatos y poemas, esta novela, “La hija del viento”, y estoy con la segunda.

• ¿Qué consejo le darías a aquellas personas que quieren empezar a escribir un libro, pero no se atreven?

Lo ideal sería comenzar con algún relato corto o con algún cuento con los que puedas ir cogiendo la experiencia y la soltura que necesitas. Así comencé yo.

Cuando me propuse escribir “La hija del viento” no sabía por dónde empezar. De aquel comienzo no queda nada en el libro. Poco a poco ha ido saliendo un texto que he tenido que retocar mucho. Pero me he lanzado y con tesón lo he terminado.

Ponerte delante del papel en blanco es duro, pero es cuestión de empezar, de dejar que los personajes hablen y de que tú los escuches. Salen muchas ideas.