El síndrome de Bergerac
Por Àngels S. Amorós
Pablo Gutiérrez. El síndrome de Bergerac. Barcelona: Edebé, 2021. 240 pp. A partir de los 12 años. Premio Edebé de Literatura Juvenil 2021.
El síndrome de Bergerac había agarrado en ella. La inseguridad, el miedo al fracaso, la decepción.
Como en una experiencia vicaria, aprendía a través del dolor de Claudia que
el amor no es ningún cuento de hadas, y que el rechazo duele más
de lo que ninguna canción y ningún poema supo expresar jamás.
La llegada de Guadalupe, la profesora de Literatura Universal, a un instituto revoluciona a un grupo de alumnos de bachillerato de dieciséis años a quienes ella da clase. La trama del libro se estructura en tres actos como si de una obra de teatro se tratase porque, de hecho, la trama se articula entorno a una pieza teatral llamada Cyrano de Bergerac cuyo protagonista tiene mucho que ver con los estudiantes, o así lo percibe Velia, la voz narrativa del libro.
En el primer acto, titulado “La extraña”, es como la presentación de los alumnos y cómo Guadalupe les invita a pensar por ellos mismos. A continuación La Hermandad de la Sagrada Nariz es cuando el grupo de alumnos decide representar una adaptación de la obra de teatro de Cyrano. El título hace referencia al rasgo físico de este espadachín que le producía bastante trauma al mismo tiempo que lo utilizaba para atacar con la espada y con su verborrea a quien consideraba que le había faltado al respeto. Por último, en Traición y rescate pone punto final al libro y también vemos cómo el grupo de compañeros toma caminos diferentes que no todos habían planeado.
Como si de un itinerario iniciático se tratara, el lector se sumerge en las vidas de este grupo de adolescentes y en todas sus vivencias académicas, personales y vitales. El bullying hace mella en algunos compañeros, lo mismo que las relaciones fallidas, los secretos que a veces permanecen en silencio y otras se propagan a los cuatro vientos. No es fácil conseguir lo que se desea, ¡pero qué bonito es soñar! Cyrano fue un diestro espadachín que demostró igual habilidad con las palabras. Sin olvidar que no se atrevió nunca a confesar su amor a la bella Roxanne y ayudó a otro a conquistarla. Sin embargo, su descomunal nariz lo llenaba de inseguridad teatral de Rostand, Cyrano gustaba de retar a sus adversarios a combates de verborrea donde él, sin excepción, resultaba siempre vencedor.
No se puede asegurar que Cyrano fuera feliz ni que se sintiera satisfecho con su vida, tampoco podemos afirmar lo mismo de los protagonistas de este libro y ni siquiera de nosotros mismos. De todas formas, Velia encuentra en la historia de Cyrano un maravillo ejemplo de reflexión que desde la madurez le ayuda a asomarse a su adolescencia. Las luces y sombras del espadachín alumbran las inseguridades, inquietudes, miedos y esperanzas de este grupo que canalizan sus sentimientos a través de una obra que deciden adaptar a su manera para hacerla propia. La inclusión de un personaje femenino que no aparecía en el guion original y todas las referencias a la cultura actual y de todos los tiempos como canciones recientes o la literatura de Kafka, Shakespeare y Salinger nos hacen pensar que no estamos ante una historia al estilo El Club de los poetas muertos -que se originó como una película y más tarde se convirtió en libro- sino ante una propuesta nueva totalmente recomendable ya que el autor es profesor de secundaria y este libro está inspirado en una experiencia similar. Pablo Gutiérrez quiso aprovechar la fascinación de sus alumnos de bachillerato hacia la adaptación cinematográfica de Cyrano de Bergerac, y propuso leer el libro en voz alta en clase. Más tarde, los alumnos la representaron en forma de teatro ante todos sus compañeros del instituto y, lo mismo que en el libro de ficción que Pablo escribió más tarde, los alumnos experimentaron el valor de la amistad, el dolor, la inseguridad, la vergüenza de actuar en público, etc. y también destacó la motivación hacia la lectura y el descubrimiento del teatro.