María Rodríguez y Sofía Parra: «Las redes sociales son fundamentales para cualquier escritor»

Por Mila Parente

Que Internet y las redes sociales han revolucionado el mundo ya lo sabemos todos. Además, son unos excelentes canales de comunicación porque permiten compartir trabajos públicamente y darse a conocer. Eso es lo que hicieron María Rodríguez (María R. G.) y Sofía Parra, dos jóvenes veinteañeras que comenzaron sus carreras en diferentes plataformas digitales.

La primera no sabe si definirse como una escritora que da clase o como una profesora que escribe porque se siente cómoda, útil y feliz en los dos ámbitos. Piensa en la idea de cambiar el mundo para que las nuevas generaciones vivan en uno mejor, ofreciendo herramientas a sus alumnos y llegando a sus lectores. Hace un tiempo subió su primera ficción a la red y brotó la magia. La segunda, aparte de escritora, es especialista en marketing digital y fiel amante de los libros desde muy pequeña. Lleva escribiendo novelas media vida y con 14 años creó su primer blog de literatura. A partir de ahí, pasó a tener un canal de Youtube y a formar parte de una revista literaria.

1.¿Cuándo empezasteis a escribir novelas y cómo definiríais vuestro estilo?

M. R.: Siempre me ha gustado inventarme historias, así que el gusanillo de escribir me ha acompañado desde pequeña. Sin embargo, no me senté delante del ordenador y me puse a escribir como tal hasta que un profesor leyó algo que había escrito a los 11 años y me animó a intentarlo. Aquello fue para mí uno de estos momentos que te cambian la vida porque ya no paré de escribir.

Yo creo que mi estilo es sencillo e intento que sea cercano. Me gustaría que un lector cogiera una de mis novelas y pudiera leerla y disfrutarla sin perderse en descripciones enrevesadas o conversaciones artificiales. ¡Y eso que me gusta mucho cuando leo un libro y el lenguaje es bonito o poético! Creo que tiene mucho valor y cuando la prosa de una novela es bonita o elegante es una maravilla, pero en mi caso diría que la sencillez es más mi seña de identidad.

S. P.: Desde muy pequeña comencé a escribir poemas y relatos. El poema más antiguo que conservo es de cuando tenía 6 años. A los 12 años empecé a escribir mi primera novela, pero mi ordenador se estropeó y no pude acabarla, me quedaba muy poco. A los 14 años abrí mi primer blog sobre literatura y a partir de ahí pasé a tener un canal de Youtube y a formar parte de una revista literaria. También terminé la que sería mi primera novela.

Todas mis historias parten de algún hecho real que me llama la atención y que quiero investigar acerca de él. Creo que mi estilo es directo y si tengo que contar cosas peliagudas no me corto, aunque siempre intento hacerlo con tacto y apoyándome en metáforas.

2.¿Cómo surgió la oportunidad de publicar vuestros primeros libros?

M. R.: Una vez cada diez años (2019) cuenta la historia de dos chicas, Judy y Leta, que se ven obligadas a verse una vez cada diez años para hacer un intercambio de bienes entre las familias para evitar las medidas del gobierno. Está ambientada en un futuro en el que la contaminación ha acabado con muchos espacios naturales y el gobierno ha creado una medida llamada ‘Barridas’ para repartir la riqueza de las familias con más recursos a las de menos. Aunque el trasfondo social es importante en la trama, en el fondo lo que cuento es una historia de amor y una que me gusta mucho.

 

La historia surgió como un relato para presentarlo a un concurso de la editorial Cerbero. Esa convocatoria estaba enfocada a crear relatos que pudieran cambiar el mundo, así que me preparé a conciencia para crear uno que pudiera cumplir con esas características. Por desgracia, no salí clasificada. Ya había oído hablar de ‘Lektu’ por otros compañeros escritores y pensé que, sin haber publicado nada antes, podría ser una buena oportunidad el colgar mi historia de forma gratuita, con pago social, en la plataforma. A partir de ese momento la releí, corregí y amplié para transformarla en una novelette y la subí a ‘Lektu’. ¡Y estoy muy contenta con la acogida que tuvo!

En cuanto a La ciudad escondida (2020) es una novela de fantasía juvenil en la que seguimos la historia de Neesha. Nuestra protagonista, una adolescente que está deseando acabar el instituto con los dolores de cabeza que le provoca, no tarda en descubrir que su vida, su familia y sus pesadillas no eran lo que había asumido. Sin hacer spoilers, solo diré que le tocará decidir en quién puede confiar, cuánto se cree de lo que le cuentan y cómo de buena idea es embarcarse en un viaje para llegar a otro mundo. Aunque, claro, viendo la alternativa que le presentan, tampoco tiene muchas opciones.

Esta novela me acompañó muchos años y con muchas relecturas y correcciones antes de que Insomnia Ediciones me dijera que quería publicarla. Con los meses de silencio por parte de editoriales o los rechazos, que casi se agradecen más, me iba convenciendo de que no tenía futuro, pero Insomnia me devolvió la confianza que había perdido de un plumazo. El trabajo con ellos ha sido estupendo y he sentido que mimaban mi historia tanto como yo, así que ver las reacciones de los lectores ahora es una recompensa enorme a tantas dudas.

S. P.: De ti para mí (2018) lo autopubliqué tras varios rechazos editoriales y varias ofertas fraudulentas de editoriales. Decidí apostar por mi historia y dar a la gente a conocer mi faceta de escritora. Al autopublicar el libro tuve que encargarme de todo lo que conlleva una publicación. Aprendí mucho y disfruté del proceso.

 

Gazania (2020) fue diferente. Era la primera novela que publicaba respaldada con una editorial. Mandé la historia a numerosas editoriales y una de ellas, Roomie Ediciones, decidió apostar por ella. El proceso de publicación fue diferente a mi anterior novela aunque seguí muy implicada en todas las decisiones.

 

3.¿Quiénes son vuestros referentes literarios?

M. R.: La mayor es, sin duda, Laura Gallego. Memorias de Idhún I: La Resistencia fue la primera novela de fantasía que leí sabiendo que era fantasía y el género me atrapó tanto que es mi favorito. Me encanta la forma que Laura tiene de escribir, y las tramas y los giros de sus novelas me gustan muchísimo. ¡Disfruto cada página! También me gusta mucho la forma que Trudi Canavan o Patrick Rothfuss tienen de narrar fantasía, aunque esos han sido descubrimientos más recientes.

S. P.: Mis referentes literarios son Elena Castillo Castro y Javier Castillo. Me siento muy identificada con los pasos que ha ido siguiendo Elena. Respecto a Javier, es una fuente de inspiración constante. Cada logro que consigue me digo que ojalá algún día conseguirlo también.

4.Las dos sois bastante activas en las redes sociales. ¿Qué importancia tienen para vosotras, como escritoras noveles, utilizarlas casi a diario?

M. R.: La verdad es que las redes sociales son más importantes de lo que había esperado en un principio. Hace años veía a los escritores como personas lejanas, escondidas entre las páginas de sus libros y la foto de la solapa, pero hoy en día puedes conocer más al autor o la autora de tus libros favoritos siguiéndole en sus redes sociales. ¡Y es estupendo!

Desde el punto de vista del escritor novel, creo que hacerse un hueco en las redes sociales es importante porque va a ser por ahí por donde te conozcan muchos de tus lectores, sobre todo en este mundo tan digital. Además, siempre se dice que las editoriales suelen fijarse en los números de seguidores para lanzarse a publicar a alguien, aunque tampoco soy quien para confirmarlo o negarlo pues cuando Insomnia me dio el sí tenía unos ciento cincuenta seguidores y solo reacciones de mi madre y mi novio a mis publicaciones.

Ahora, como autora, lo que más disfruto de las redes es poder hablar con mis lectores de la novela y comentar con ellos cuando me escriben. ¡Aunque, eso sí! Es importante no ser monotema en redes. Si hablas todo el rato de ti misma o de tus novelas, lo único que vas a conseguir es aburrir a la gente.

S. P.: Las redes sociales son fundamentales para cualquier escritor. Es la vía para estar en contacto con tus lectores. Además, son un método muy eficaz para que otras personas te conozcan. Esto se podría aplicar a cualquier artista. Al final, las redes sociales son herramientas gratuitas que te ayudan a estar presentes.

El escritor, hoy en día, tiene un papel fundamental en el marketing de la novela y es el encargado de no dejar morir a sus libros.

5.¿Qué consejos les daríais a aquellos jóvenes que estén pensando en abrirse paso en el mundo de la literatura y cómo podrían comenzar a cumplir su sueño?

M. R.: El primer consejo que les daría sería que escribieran lo que quisieran sin importarles lo que otros puedan pensar. Escribir lo que está de moda o coartarte por lo que otros digan puede matar la creatividad y al final el primer objetivo cuando escribes es divertirte haciéndolo.

Una vez en el camino de conseguir su sueño, les diría que siguieran leyendo, practicando y mejorando porque es increíble lo mucho que podemos mejorar con práctica en unos años. Y, sobre todo, ¡no rendirse aunque sea difícil si es lo que quieren! De algo hay que vivir, por supuesto, y por eso buscamos trabajos y nos sacamos carreras, pero si escribir te hace feliz, intenta sacar un huequecito en tu rutina para hacerlo. Yo pasé los cuatro años de carrera sin escribir y cuando volví a dedicar tiempo a hacerlo fui mucho más feliz.

S. P.: El mejor consejo que podría darle es que trabaje en ello y sea constante. La primera editorial tradicional que apostó por mí fue tras escribir cuatro libros. Es un camino difícil. Cuando llega la oportunidad correcta cógela y lucha por ella.

6.Por último, ¿cuáles son vuestros próximos proyectos?

M. R.: El más cercano es la publicación de la segunda parte de La niña de los ojos grises en octubre, Los recuerdos robados. Sin destripar el primer libro, solo puedo decir que la historia continúa donde terminó la primera novela, responderá a preguntas que han quedado abiertas y presentará nuevos personajes.

Además de eso tengo dos novelas más, una de fantasía romántica y un retelling que planeo enviar a concursos, y estoy empezando a planificar una novela de fantasía middle grade. ¡Y aún tengo que escribir la tercera parte de La niña de los ojos grises! Esa será mi novela del verano. ¡Y estoy deseando ponerme con ella!

S. P.: Este año dos historias verán la luz respaldadas por editoriales, más pronto que tarde, y tengo otro contrato firmado para 2022.