“Aisha”, David Trashumante

Por Alberto García-Teresa.

Ante el inminente colapso ecológico y social al que nos precipitamos, devolver la mirada a los vínculos y al entorno natural parece constituirse un asidero para redimensionar aquello que estamos a punto de perder.

David Trashumante (Logroño, 1978) conjuga ambos elementos solapándolos en este poemario, en donde los poemas de amor (a Isa) se construyen con el campo semántico de la naturaleza desde una inmersión y una conexión material de resonancias trascendentes.

El inquieto Trashumante ha presentado siempre libros de una gran unidad conceptual y lingüística, la cual es potenciada precisamente por su estimulante afán experimentador. Aisha continúa con ese planteamiento de escritura y nos lleva a un terreno inédito para este prolífico autor. Como proyecto, en concreto, este libro avanza desde el lenguaje más fracturado de Apenas (su último y más brillante trabajo) y, frente a cierta atmósfera de desolación de aquel, presenta un sentimiento positivo como elemento nuclear y vértice movilizador.

En la comunión con la naturaleza encuentran, tanto el yo como Aisha (el nombre con el que se alude a la amada, y a quien dirige su voz), el sentido y la vivencia de una existencia plena. Aparecen fuera de la comunidad, y cobran allí fuerza, autoestima y disfrute del vivir. La relación (horizontal e integradora, nunca utilitarista) se establece con la vegetación y con el ecosistema en su conjunto. Especialmente, lo hace con el bosque, la montaña y la pradera. De hecho, apenas aparecen otros animales. El “yo” nos transmite cómo Aisha se relaciona con ese entorno, cómo lo contempla, interactúa y, finalmente, se funde con él. En cualquier caso, la palabra (como sinécdoque de la comunicación) aparece reiteradamente como elemento que preocupa o que activa la acción de Aisha.

La dicción pasa, esta vez, por un tono más calmado y fluido, lejos de las fracturas y violencias de poemarios anteriores. La selección léxica opta por referencias más diáfanas, imágenes sencillas y cierta placidez. De esta manera, levanta atmósferas cálidas donde la contemplación y la exaltación resuelven la tensión del asombro y la mirada maravillada. Pero esa cercanía de la amenaza de la desaparición se instala a través de pesadillas y, también, como actitud de resistencia ante la cercanía de quienes perpetran el ecocidio. En cualquier caso, el poemario aloja un par de piezas experimentales y otras en las se cuela una afiladísima ironía, siguiendo el registro más habitual de David Trashumante. Aun así, esa singular manera de ensanchar, abarcar y capturar conceptos y entornos alrededor de una misma idea en cada poemario persiste en el conjunto de piezas que integran esta entrega.

Aisha, por tanto, constituye un canto de amor con una doble mirada, un lenguaje que resalta la belleza y la resituación del ser humano dentro del entorno natural como horizonte.

Aisha

David Trashumante

72 páginas

Ya lo dijo Casimiro Parker, 2021

ISBN: 978-84-121574-9-9

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *