‘Literatura’, un bonito homenaje que no acaba de encajar como novela

SARA ARANDA MARTÍNEZ. @SarArandam

Título: Literatura

Autor: Daniel Remón

Editorial: Seix Barral

Daniel Remón es dramaturgo y guionista de cine. Ha colaborado en la escritura de las películas Casual Day, Cinco metros cuadrados, Paradiso, El perdido y El arte de volver. Entre sus guiones destaca el de Intemperie, basado en la novela de Jesús Carrasco, y por el que obtuvo el Goya al mejor Guion Adaptado en 2020. Literatura es su primera novela.

Una noche, Teo le pide a su tío Daniel que le cuente un cuento. Pero no uno cualquiera, sino uno que incluya a un niño que se llame Teo, un coche rojo, una bruja mala y una buena, un monstruo, Evelyn, una maleta, un montón de dinero y viajes en el tiempo. Un reto difícil, pero que Daniel se ve incapaz de rechazar.

Literatura narra la historia de una maleta llena de dinero que irá pasando de mano en mano hasta acabar con quien más se lo merece. Una historia que se ambienta en el Madrid de la pandemia, pero también en Filipinas, Aragón y Londres. Una mezcla de realidad y ficción que narra la historia de la saga familiar de Daniel Remón y a la vez busca satisfacer los deseos de su sobrino.

La primera novela de Remón es una mezcla de muchas cosas. De realidad, porque habla de pandemia, el número de contagios y el confinamiento, y de fantasía, porque un monstruo con apariencia de caimán persigue a los protagonistas. Pero también es una mezcla entre novela y autobiografía; entre un cuento para niños y un devenir de acontecimientos incomprensibles para los mismo; entre un monólogo que reflexiona sobre el oficio de escribir y una historia contada por un narrador omnisciente; entre novela y guion. Literatura se queda a medias de todo, pero sobre todo, se queda a medio camino entre ser buena y mala.

Parte de una idea original. Recuerda a esos juegos de campamento en los que a partir de unas palabras el grupo debe construir una historia. Normalmente se acaban enlazando frases sin mucho sentido que despiertan la risa de todos los participantes, por el absurdo. En Literatura, con un poco más de acierto, ocurre lo mismo. Todo está enlazado, sí, pero ¿con qué propósito? Con el de cumplir los requisitos de Teo.

Literatura es un homenaje a los padres de Remón, a su hermano y a su cuñada. Pero ante todo es un precioso legado para su sobrino, de eso no hay duda. Esta novela está dirigida y dedicada a un único lector, y quizás por eso no consigue enganchar al resto. Los personajes a penas se desarrollan, aparecen y pronto desaparecen para dar paso al siguiente. El lector acaba conociendo más al propio Remón que a los protagonistas de su historia.

Como reflexión al acto de escribir, no está mal, pero tampoco bien. A medias. Es curioso cómo eligió el nombre del monstruo de su cuento. Un nombre impronunciable que esconde un bonito mensaje: los primeros golpes de su sobrino sobre el teclado.

Literatura llama la atención por el contexto en el que se escribió, en plena pandemia. Y por el juego que le propone su sobrino Teo. Sin embargo, no acaba de encajar como novela. Quizás si se presentase como reflexión o autobiografía, el lector no se sentiría engañado por la promesa de una historia que al final no es la protagonista.