‘Las lágrimas de la libélula’, de Óscar Goñi
Mª ÁNGELES SAAVEDRA.
Las lágrimas de la libélula es una novela de ficción, el primer libro de una saga de cinco libros en total, publicada bajo el sello editorial Cazadores de Ratas.
Un terrible mal acecha el mundo pero este guarda un secretismo que su protagonista, Enya, deberá desvelar. Enya es una joven universitaria dotada de una inteligencia sin igual que, secretamente, viene a ser la mejor hacker informática del planeta. Se hace llamar ‘Libélula’.
Ella forma parte de un grupo de amigos de la universidad que, junto a su padre, la acompañarán en la misión que le será otorgada, nada más y nada menos que adentrarse en la Realidad Aumentada y donde un error podría incluso conducirles a la muerte.
¿Y si alguien con un talento que jamás ha existido en la historia, concibiera un plan capaz de transformar la Tierra en un Edén?
Para ello, Enya deberá enfrentarse a un cracker informático que está infectando el mundo de manera expansiva y que es el causante de liderar misteriosos asesinatos.
Con capítulos cortos, narrado en tercera persona, haciendo uso de numerosos personajes, incluyendo muchos diálogos y añadiendo escenas sorprendentes e intrigantes, Óscar Goñi ha escrito una novela de ficción que bien podría ser un reflejo de nuestra sociedad actual, donde la Realidad Aumentada es ya un hecho existente y a través de la cual, como en un juego, depende la supervivencia de muchas vidas humanas.
El escritor de esta saga, Óscar Goñi , es natural de Irún (Gipuzkoa), apasionado desde niño a los cómics, al ajedrez, a la literatura y a la ópera. Con catorce años publicó un cómic: ‘Monstruos’ para la editorial Ttartalo, dedicado a un público infantil. Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad de Navarra, ha trabajado para ‘El Diario Vasco’ de San Sebastián en el departamento de Diseño e Infografía. Años más tarde comenzó a encargarse de una sección centrada en el Noveno Arte mientras pone en marcha el Salón Internacional del Cómic y Manga de Donostia-San Sebastián, del que es director.
Una de las cosas más atrayentes de su libro, en un primer vistazo, es el diseño de su portada, futurista, con tonalidades de azul neón y con una temática cibernética, digital. La gran cantidad de diálogos y vínculos entre sus personajes dotará al libro de una lectura intrigante. La forma narrativa es fluida y amena, para los amantes de las nuevas tecnologías, este libro podría engancharos.
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