El lento adiós de los tranvías de Manuel Rico
Esta obra, publicada por primera vez en 1992, es, a juicio del escritor José María Merino, “una novela verdaderamente representativa de la libertad de imaginación autoral” que irrumpió en la última década del siglo XX.
La trama nos ubica en los años finales de la década de los sesenta en el Madrid gris y desarrollista del franquismo. Censura, vigilancia ideológica, tensiones y la investigación de un periodista que desafía el relato absolutista de la dictadura, son algunas de las piezas que sustentan una novela necesaria.
El lento adiós de los tranvías (Huso Editorial, 2020), novela que apareció, en primera edición, en 1992, es la historia de una apasionada búsqueda. Un joven estudioso de viejos periódicos locales intenta dar con el paradero de un artista desaparecido en la posguerra y del que tan solo tiene difusas noticias de mucho tiempo atrás. Con el autor, nos adentramos en una ciudad en la que la vida discurre entre la realidad oficial, el conformismo y el mundo de la oposición clandestina.
El azaroso proceso de investigación se ve cruzado por esa realidad contradictoria, preñada de sueños, miedos, entusiasmos y deserciones. Estamos ante una rigurosa novela que sumerge al lector en un mundo inquietante: los últimos tranvías de Madrid, el deterioro de la vieja Ciudad Lineal, la incierta geografía de una ciudad cambiante, moviéndose entre un pasado provinciano y una vocación cosmopolita. Estamos, pues, ante una ambiciosa penetración en una parcela de nuestra memoria colectiva, ante una inmersión en la vida cotidiana del franquismo. Con esta novela, Manuel Rico, dueño de una prosa rica y precisa a la vez, llena de registros y no exenta de despuntes líricos, puso de relieve que es dueño de un universo propio, cruzado por no pocas preocupaciones existenciales.
Para esta edición, Manuel Rico ha sometido El lento adiós de los tranvías a una profunda y exigente revisión de tal modo que el lector está, en el fondo, ante una obra renovada y viva, rigurosamente actual, que enlaza con los impulsos que en la cultura y en la sociedad española apuestan contra el olvido y la desmemoria. Una novela necesaria.
José María Merino, narrador, poeta, ensayista y académico de la Real Academia Española, escribe en el prólogo de El lento adiós de los tranvías que «La trama principal se ordena sobre el esfuerzo de Mario Ojeda, apoyado fuertemente por Eguren, en reconstruir, mediante la escritura de su ensayo, la vida de Eladio Vergara, un importante artista plástico republicano que fue amigo de su tío Elías Ojeda. Al hilo de esa escritura, muy dificultosa por la extraña falta de datos a partir de la Guerra Civil, se irán urdiendo sorprendentes sucesos, que el autor sabrá desenredar con brillantez, sin que nada quede por resolver en el ambicioso planteamiento dramático”.
La reedición de esta novela nos solo nos permite la recuperación de un excelente texto narrativo, sino que nos sirve también para considerar el nivel de calidad del género cuando ya la democracia se había asentado entre nosotros.
El lento adiós de los tranvías se presenta el día 30 de enero en biblioteca de La casa encendida a las 19:00. El autor estará acompañado por Luis García Montero, escritor, catedrático y director del Instituto Cervantes.
Biografía
Manuel Rico (Madrid, 1952) es poeta, narrador y crítico literario. Licenciado en Periodismo, ha colaborado en diversos diarios y revistas (El Mundo, Cuadernos Hispanoamericanos, Ínsula, Letra Internacional, Mercurio, Turia…). Ejerce la crítica de poesía en el suplemento Babelia, del diario El País. y colabora con artículos de política y cultura en Zenda, en el diario digital Nueva Tribuna y en Todoliteratura.es, entre otras publicaciones virtuales.
Como poeta ha publicado La densidad de los espejos (1997 y 2017), Premio Hispanoamericano Juan Ramón Jiménez, Donde nunca hubo ángeles (2003), Fugitiva ciudad (2012). Premio Internacional Miguel Hernández, y Los días extraños (2015). La mujer muerta (2000 y 2011), Los días de Eisenhower (2002), Premio Andalucía de Novela, Verano (2008), Premio Ramón Gómez de la Serna 2009 y Un extraño viajero (2016), premio Logroño 2015 de narrativa, son sus últimas novelas.
Es autor del ensayo Memoria, deseo y compasión (2001) sobre la poesía de Vázquez Montalbán y de los libros de viajes Por la sierra del agua (2007) y Letras viajeras (2016). En enero de 2019 se publicó libro, Escritor a la espera. Diarios de los 80.
También ha publicado, para la editorial Cátedra las ediciones críticas a Praga y Una educación sentimental, de Manuel Vázquez Montalbán (2001), y de Blanco Spirituals y Las rubayátas de Horacio Martín, de Félix Grande (1998).
Dirige, desde 1998, la colección de poesía de Bartleby Editores y desde mayo de 2015 es presidente de la Asociación Colegial de Escritores de España (ACE).