De boca en boca y río porque me toca
Por Àngels S. Amorós
David Hernández Sevillano (texto) y Carmen Queralt (ilustraciones). De boca en boca y río porque me toca. Salamanca: La Guarida Ediciones, 2018, 40 pp. A partir de los 3 años.
Con un total de seis poemas de diferente extensión que van alternando versos de cinco y de siete sílabas, nos encontramos con todo un elenco de personaje de los más variopinto. Vamos a encontrar: piratas, olivos, niña-lobo, barcos de papel, brujas, animales, etc. que se combinan con divertidas ilustraciones que nos invitan a jugar. Estas poesías abordan temáticas tan dispares como el tiempo, los deseos, el juego, la naturaleza y, sobre todo la libertad y la alegría:
Los frescos /membrillos / no quieren /cuchillos.
Las flores /coquetas /no quieren macetas. /- Y tú, / ¿qué quieres / amigo?
– ¡Que rías / conmigo!
A destacar el primero de los poemas que abre el libro y toma el título de todo el volumen: De boca en boca y río porque me toca. Este poema se presenta como una carrera de relevos donde diferentes personajes, sobre todo animales, se dan la vez sonriéndose unos a otros.
Felisa, que corta /de un tajo el flequillo, / se le ha sonreído /a un gato amarillo /y el gato, /cortito de vista, /se la ha sonreído / a un submarinista.
Porque la risa es el hilo conductor que atraviesa todo el libro en forma de historias que imaginamos escuchar dando brincos, cantando y bailando. Una excelente manera de motivar a los más pequeños y contagiarles el amor por la lectura. Una labor que facilita la rima sencilla y musical, pero también las ilsutraciones en collage, ceras y otras técnicas que dan vitalidad y emoción a lo que se cuenta.
Si cada poema trata una anécdota diferente, todos tratan de lo mismo: la alegría infinita de las cosas sencillas y que obra el milagro de dar vida a objetos inanimados. Con el barco de papel podemos navegar en charcos, los relojes sirven para olvidarse de las prisas y los paraguas son de chocolates y así: ¡Bienvenida sea la lluvia!