Rafa Maza renueva su talento y estrena “Fabiolo Connection” entre jubilosas carcajadas
Por Horacio Otheguy Riveira
En 2014 festejamos a un actor con muchos recursos en un show muy divertido que a ratos decaía (Fabiolo Gran Slam: Parodia del pijo en un país dominado por pijos), hoy en su flamante “Fabiolo Connection” todo es ganancia, ya que la formación integral de un actor completo, que juega con igual talento el mimo, el clown y la improvisación con algunos espectadores, sucede dentro de una dramaturgia muy sólida, muy seria, a la altura de los mayores humoristas.
Solo en escena con eficaces efectos de sonido, Rafa Maza compone un espectáculo de rigurosa parodia de lo humano y lo divino, paseando con elegancia por lo políticamente incorrecto mofándose no solo del bueno, ignorante y cretino de Fabiolo, arquetipo de seudoburgués con más ínfulas que riqueza, sino también de muchas otras figuras y situaciones sociales, y cuando entra en ciertos tópicos étnicos lo hace sin siquiera rozar la menor caricatura racista: ¡es siempre una fiesta de actualidad, navegando por la ridícula tendencia general a querer ir más allá y dominar el mundo entre “jeques que se quejan cuando a la princesa le da jaqueca”!
No hay chanza que diluya las permanentes carcajadas que fluyen entre canciones (hay dos momentazos de zarzuelas muy populares adaptadas “fabiolísimamente”), gags. chistes, malabares y muy gratos saltos en el tiempo con imitaciones de personajes inmediatamente reconocibles.
Un espectáculo muy completo, nada que ver con un monólogo al uso, elaborado con gran minuciosidad y puesta en práctica de muchos de los elementos actorales aprendidos en una larga formación académica y en diversos escenarios.
En las arenas ardientes del desierto y en la lujosa jaima del emir nuestro pijo preferido descubrirá el sentido de la vida y de las prospecciones petrolíferas en boca de sultanes, califas, jeques, bereberes, sátrapas, imanes, chambelanes, pachás, reyes eméritos o conocidas estrellas del mundo de la cultura y el espectáculo en un ambiente de mil y una noches
En medio de esta atmósfera arenosa de sensualidad y deleite, Fabiolo descifrará el futuro que nos aguarda, además, de hacer su consabido repaso a la más candente actualidad con el estilo fresco e irreverente al que nos tiene acostumbrados. Para ello nuestro héroe de la raqueta contará, aparte de su revés y de su Visa de diamantes, con un poderoso aliado tecnológico, regalo del jeque: unas gafas de realidad virtual “fabiolosas”. Porque Fabiolo quiere enseñarnos que hay dos visiones de la vida: una ordinaria y vulgar, y otra más cool y pija. ¿Cuál es la tuya?
Y a poco de empezar, le escuchamos cantar una presentación que le pinta de cuerpo entero:
Yo no soy ese que tú te imaginas
Un pijo sin problemas de vida tranquila
Que un día golfea y al otro navega
Ese pijo ¿si…no…? ese no soy yo.
Yo no soy ese que tú te pensabas
Que ríe por nada, que va de Dolce Gabbana
Que igual come ostras o colas de gamba
Ese pijo ¿si…no…? ese no soy yo.
Que dice Ósea tras cada palabra
Me importa el ozono y las personas humanas
Ese pijo ¿si…no…? ese no soy yo.
Yo Soy Fabiolo de la Mora y Leja
El pijo olímpico y con clase
Que con su raqueta su bola y con su pase
Deja a toda la afición perpleja.
(Autor: Alberto Gálvez “que colabora conmigo en la dramaturgia de mis espectáculos”)