Ángeles Martín-Blanca Oteyza-Paloma Montero: ¡promesa cumplida!

Por Horacio Otheguy Riveira

A finales de julio tuvimos una grata sorpresa de la que dejamos constancia en estas mismas páginas: «Cuidados intensivos»: una lectura dramatizada muy prometedora. Ahora, en pleno aluvión de estrenos en septiembre, podemos asegurar que estábamos en lo cierto y que, puesta en escena la misma obra con las mismas actrices, la promesa se ha cumplido con creces.

Mar, Luz y Sol, tres jóvenes enfermeras en el área de Cuidados Intensivos de un hospital español. Así bautizadas por una madre nada convencional, un personaje ausente de escena, pero clave en la historia y el presente de este trío de personalidades muy distintas que se complementan en una hermandad digna de alabanzas: con su calidez, su audacia en la manera de afrontar miedos y necesidades, y su extraordinario sentido del humor que les permite reírse de sí mismas en compañía. Hermanas y amigas con las que reír y emocionarse limpiamente, sin golpes bajos ni tacos fuera de lugar.

Y con mucha originalidad, pues en el marco de las muchas comedias de y con mujeres de los últimos años (algo muy notable también fuera de España) en este caso el devenir sentimental y profesional de los personajes las sitúa en el esfuerzo de una profesión muy poco transitada en el teatro, por otra parte eminentemente femenina. Las angustias, sofocos y malos tragos que han de pasar estas enfermeras transitan en un brillante juego de diálogos con estupendo ritmo, breves, ágiles, a través de los cuales nos cuentan todo lo que les pasa y lo viven sin salir del vestuario del hospital, un hallazgo muy bien dirigido por Blanca Oteyza, que ha logrado mantener en hora y media el tono de comedia ligera por la que pasa la historia de estas tres chicas entre 1982 y 2012, con el brío, las lágrimas y las muchas risas que generan con las características de los conflictos de cada periodo de su existencia.

Tras ellas, un texto excelente producido por el talento de otras dos mujeres, escritoras con amplia experiencia en cine y teatro como Yolanda García Serrano (Shakespeare nunca estuvo aquí, Ser o no Cervantes, ¡Corre!) y Laura León, guionista, aquí debutante como dramaturga. Entre ambas han elaborado una acción envolvente donde el brillo de situaciones muy coloquiales resulta divertido, y al mismo tiempo facilita la expresión de sentimientos profundos. A continuación una muestra del aire casi musical que tienen las conversaciones mientras siempre están haciendo algo: cambiarse, comer, buscar, encontrar…

(…) MAR.- Anda, dame las llaves del coche.

LUZ.-  Espérate y nos vamos juntas.

MAR.- Prefiero ir sola. Hoy me vienes mal.

LUZ.- ¿Por qué? ¿Qué vas a hacer?

MAR.- Tirarme al doctor Hernández

LUZ.- ¿Has quedado con él?

MAR.- No, pero me voy a hacer la encontradiza en el parking. Un tropiezo accidental,  un escote que se abre…

LUZ.- Un sujetador tres tallas menos.

MAR.- Así se realza el pecho.

LUZ.- Al doctor Hernández le gustan planas. 

MAR.- ¿Cómo lo sabes?

LUZ- Está loco por la pediatra.

MAR.- ¿Quién te lo ha dicho? 

LUZ.- Sus ojos. Le salen chiribitas.

MAR.- Es astigmático.

SOL.- Pues a ti ni te mira.

MAR.- Porque no coincidimos. Como estamos en diferentes plantas…

SOL.- Por cierto, papá ha vuelto hoy a urgencias.

LUZ.- ¿Otra vez?

MAR.- Lo que me extraña es que no venga todos los días, con lo hipocondríaco que es.

LUZ.- Raro es que no haya preguntado por nosotras.

SOL- Ha preguntado y he ido.

LUZ.- ¿Y por qué no nos has avisado?

SOL.- No iba a haceros perder el tiempo con sus tonterías. Basta con que se lo haga perder al doctor Hernández.

MAR.- Ay, mira, ya tengo una excusa para abordarlo. Darle las gracias por atender a papá.

SOL.- Ha sido un poco seco, eh. 

MAR.- No me extraña. Le colapsa las urgencias dos veces a la semana. 

SOL.- Y con mamá a su lado, regañándole. 

LUZ.- ¿Al doctor Hernández?

SOL.- A papá, Luz, a papá. (…)

Dentro del abundante público de un sábado, escuché a dos señoras que se preguntaban si las autoras eran profesionales de la salud, «o una de ellas por lo menos, porque dan en el clavo de situaciones que se repiten todos los días entre nosotras». Esa impresión de autenticidad se consigue desde el primer momento. Tres actrices con tanta experiencia como Ángeles Martín, Blanca Oteyza y Paloma Montero, hacen de Luz, Mar y Sol tres compañeras de travesías con mucha energía en su lucha diaria, sus devaneos sentimentales y su esperanza de seguir adelante, de luchar para ser ellas mismas sin dejarse la piel en el camino, por otra parte una constante en la ya larga trayectoria como autora de Yolanda García Serrano.

El resultado es un espectáculo de gran disfrute para las mujeres y especial regusto para los espectadores masculinos que aparecemos mencionados como estupendos, blandengues, irresistibles o anodinos, en una generosa panorámica de mujeres muy interesantes, asumidas por actrices formidables.

Las hermanas Mar, Luz y Sol, tres nombres con mucho empaque para tres personajes de gran calado dentro de un ritmo de comedia ligera interpretado por espléndidas actrices.

 

 

Dramaturgia Yolanda García Serrano y Laura León

Dirección Blanca Oteyza

Escenografía y diseño vestuario: Pier Paolo Álvaro, Roger Portal (AAPEE)

Diseño iluminación: Alejandro Pintado Torres

Música original: Miguel Barón

Fotografía y diseño gráfico: Javier Mantrana

Ayudante de dirección: Rosa Fernández Cruz (COART+E)

Una producción de COART+E (Teatros Luchana, Blanca Oteyza, Paloma Montero, Jerónimo de Miguel)

TEATROS LUCHANA. Viernes, sábados y domingos desde el 6 de septiembre 2019

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