ARTÍCULO/ La historia de Parvana en las novelas de Deborah Ellis
ANA BELÉN JARA.
«Alza tus palabras no tu voz, es la lluvia la que hace que crezcan las flores, no los relámpagos», The Breadwinner.
Crudo, realista, pero inspirador, el best seller de la autora canadiense Deborah Ellis, The Breadwinner (2001) fue recientemente adaptado al cine de animación bajo el mismo nombre y con la dirección de Nora Twomey. Una película que se presenta a un público infantil y toca temas tan complejos como la misoginia, la desigualdad social y la historia de un país en guerra, se acerca mediante la fantasía a una historia llena de verdades y que necesita ser oída.
La escritora y creadora de esta historia ha publicado docenas de libros entre los que incluye la continuación de esta novela homónima, Parvana’s Journey (2002), Mud City (2003) y My name’s Parvana (2012). En la mayoría de ellas, la protagonista es una niña afgana de 11 años llamada Parvana.
¿Qué hay detrás de esta historia? Esta serie de libros es el resultado de la experiencia de su autora como voluntaria en diferentes campos de refugiados en Pakistán y Rusia. Durante esta labor pudo realizar entrevistas a niñas y mujeres que vivían en diferentes situaciones de riesgo y atravesaban todo tipo de dificultades. Así nació el personaje principal de la obra, Parvana, que durante el régimen Talibán tuvo que hacerse pasar por un niño para poder brindar sustento a su familia.
A partir de su compromiso como activista antiguerra y voluntaria, la literatura y el cine le dieron a Ellis la posibilidad de inspirar, investigar y analizar sobre la infancia, el poder las historias y concientizar sobre las atrocidades que la guerra desencadena en la vida de niñas y niños en Medio Oriente.
En una conferencia brindada en México en el 2013, la escritora contó de qué manera realiza las aproximaciones a sus historias, es decir, su metodología de trabajo: “Cuando escribo una novela uso el método de un texto común, pero en el libro añado siempre algo que cuente una historia real detrás de las situaciones ficticias, por ejemplo, contar a través de un personaje una historia real y particular del país”.
Además, como escritora y activista, remarca constantemente la relevancia y el poder que tienen los relatos para dar a conocer historias crudas o caóticas, pero que son necesarias porque reflejan la toma de decisiones que afectan y afectaran al mundo en el que se desenvuelven los niños.
Este best seller tuvo un impacto muy positivo en activistas y colectivos que están comprometidos con el futuro de los jóvenes. “El Breadwinner de Deborah Ellis es el único libro que desearía que todos los estudiantes leyeran”, comenta Malala Yousafzai, Premio Nobel de la paz por su activismo a favor de los derechos civiles, sobre todo los de las mujeres del río Swat (Khyber Pakhtunkhwa, noroeste de Pakistán), donde el régimen talibán también ha ejercido su poder y represión sobre las mujeres y niñas. “Creo que es importante que las niñas de todo el mundo aprendan cómo se trata a las mujeres en algunas sociedades” comenta la joven a The New York Time en By the Book (2014) y reconoce que el personaje de Parvana se caracteriza por creer en sí misma y luchar contra el hambre, el miedo y la guerra, toda una inspiración para las niñas del mundo.
El acercamiento de Malala con la obra de Ellis fue muy especial, pues leyó los libros en la biblioteca de su escuela gracias a la directora de su colegio, quien la animó a ir más allá de lo propuesto por la institución y buscar nuevos libros.
Quien también se inspiró con esta obra fue la guionista Anita Dooron. Ella se encontró con el reto de adaptar la novela de Ellis en el 2015, y gracias a su aporte The Breadwinner llegó a los cines. Además de su compromiso con la historia, ella es reconocida como activista que trabaja para prevenir el extremismo violento, a través de historias de heroísmo.
En definitiva, la historia y todo el trabajo que hay detrás de The Breadwinner, demuestran de qué manera unas pocas personas pueden amenazar la libertad de un pueblo y lo necesario que es alzar la voz, ya sea a través de la educación, la escritura e incluso el mismo cine. A pesar del duro y realista relato de todo lo que atraviesa la familia de Parvana, el libro ofrece lecciones sobre el deber de la sociedad en asegurar los derechos básicos de las niñas, como el a la educación, la libertad de pensamiento y movimiento, y la igualdad de género. Pero, además, reclama que se generen nuevos espacios de debate en las aulas donde niños y jóvenes puedan tomar conciencia de otras realidades con las que no conviven a diario.
es muy interesante para todos los niños que tienen mala educacion.