“Concierto para Zapata y Orquesta”, de José Manuel Zapata: porque el humor es un asunto muy serio

Por: Alberto Medina
El tenor José Manuel Zapata rompió las barreras de la música clásica con el espectáculo  “Concierto para Zapata y Orquesta” el pasado 6 de diciembre en el Teatro Cervantes de Málaga.

La música siempre ha estado unida con la humanidad desde que los primeros homínidos aporreaban troncos y piedras para alcanzar extrañas melodías. No fue hasta la Edad Media cuando surge una notación musical simbólica que permitió a los compositores escribir de forma detallada el tempo, la métrica, el ritmo, y la ejecución precisa de cada pieza musical. Por tanto, la música ha evolucionado junto a  la humanidad, y por eso es necesario preservar este legado aunque los gustos vayan cambiando.

Se ha trabajado mucho en acercar la música clásica a nuevos oídos, con acercamientos multidisciplinares como con la “Guía de Orquesta para los Jóvenes” de Britten, o las películas “Fantasía” y “Fantasía 2000” de Disney, pero aun así la media de edad en los auditorios no deja de crecer. José Manuel Zapata, con el espectáculo “Concierto para Zapata y Orquesta” intenta usar el humor para llevar la música clásica a todos los públicos, tanto para los neófitos como los que nos conocemos de memoria la numeración de todos los conciertos de Mozart.
José Zapata lleva más de 20 años entre bambalinas, y en ese tiempo ha cantado en teatros como el Metropolitan Opera House de Nueva York, Teatro Real de Madrid o el Teatro Liceo de Barcelona, y ahora incluso imparte charlas y conferencias. “Concierto para Zapata y Orquesta” es un concierto muy gamberro para todos los públicos, gracias al trabajo conjunto con Paco Mir y Juan Francisco Padilla, que parodia algunos de los clichés de la música clásica. Rossini, Beethoven, Verdi, Tchaikovsky… son algunos de los compositores que fueron interpretados por la Orquesta Filarmónica de Málaga. El público de Málaga disfrutó mucho en este ambiente prenavideño, incluso hubo reivindicación para la construcción del Auditorio de Málaga.

Según el propio Zapata: “En España, hasta ahora, cuando se hacen espectáculos con la fórmula humor + música clásica, siempre se cuenta con formaciones de poca calidad, y se considera esta fusión como algo marginal e impropio de auditorios serios. Y es todo lo contrario. El humor es muy serio. Tan serio como para que formaciones como Berliner Philharmonic, New York Philharmonic, Israel Philharmonic, o London Philharmonic, hayan llevado a cabo espectáculos de este tipo”.El tenor granadino se inspira en uno de sus referentes artísticos absolutos, el actor, músico y showman Danny Kaye.En concreto, Zapata se ha inspirado en la actuación que Kaye ofreció en 1981 a los mandos de la Filarmónica de New York desde el Lincoln Center, y por la que fue nominado a los premios Emmy.