CNTC 2018-2019: nueva versión de El castigo sin venganza, entre felices reposiciones y potentes novedades
Por Horacio Otheguy Riveira
La genial tragedia de Lope de Vega, El castigo sin venganza, cerrará el año, entre noviembre 2018 y febrero 2019, dirigida por Helena Pimenta con un reparto afín, de la casa, que ya ha empezado a desarrollar talleres de investigación en torno a una versión de Álvaro Tato, un dramaturgo que ya nos impactó en anteriores temporadas. Es esta una de las obras mayores del siglo de oro en la que la plasmación de contradicciones humanas en un contexto de abuso de poder logra una de las voces más personales del gran escritor.
Antes y después del gran premio del Castigo, valga la paradoja, pasearán varias funciones por el sublime verano de Almagro, y en La Comedia podremos volver a ver funciones de gran riqueza, como La dama boba o Los empeños de una casa, muy esperadas reposiciones que dejaron mucho público fuera. Y elencos muy importantes estrenarán espectáculos que oscilarán entre la diversión de varias comedias y renovadas tragedias.
José Carlos Plaza dirige y coescribe con Pedro Víllora un especial Auto de los inocentes, resurrección de los autos sacramentales aprovechando su carga de esperanza eterna, esta vez situados en un campo de refugiados. Se representará en La Comedia del 21 de septiembre al 21 de octubre, y también en iglesias y catedrales en su gira posterior.
Eduardo Vasco pondrá en escena, con una versión de Yolanda Pallín, Entre bobos anda el juego, de Francisco de Rojas Zorrilla, con sus habituales de la Compañía Noviembre: Arturo Querejeta, Daniel Albaladejo, Isabel Rodes y Fernando Sendino, entre otros. Del 13 de febrero al 3 de marzo.
Del 12 de marzo al 7 de abril, Iñaki Rikarte (Solitudes, Ildebrando Biribó…) asumirá la dirección del estreno de la quinta Joven Compañía en una comedia fabulosa de Agustín Moreto, El desdén con el desdén:
Del 7 de mayo al 23 de junio, Mario Gas montará La hija del aire de Calderón de la Barca en sus dos partes: “Calderón es un autor complejo, creador de un teatro que es fértil reflejo existencial e ideológico de una época convulsa llena de claroscuros y contradicciones… La hija del aire y Semíramis son todo un prodigio escénico que nos sigue hablando de lo inaudito y sorprendente del devenir humano”.
Debutarán en la Compañía Nacional de Teatro Clásico: Ainhoa Amestoy, Carolina África y Fernando J. López, entre otros.
“Después de explorar el universo de la risa en la comedia nueva durante las dos temporadas precedentes con El perro del hortelano de Lope de Vega y La dama duende de Calderón de la Barca, llega el momento de regresar al ámbito más dramático de nuestro repertorio. Desde el montaje dirigido por Eduardo Vasco en 2005 no se abordaba en el marco de la Compañía un título tan esencial como El castigo sin venganza; en esta ocasión nos acercamos a la tragedia desde una perspectiva descarnada, casi ritual, desarrollando la potencia poética y los aspectos simbólicos de la trama para enredar al espectador en la tela de araña que envuelve a los personajes: conflictos irresolubles, cinismo sin barreras, presiones contrapuestas y un sarcasmo aciago que tiñe hasta el título de la obra.
El duque de Ferrara ostenta los privilegios y la impunidad de un poder que lo mantiene en frágil equilibrio entre la presión de la opinión ajena y las contradicciones de una razón política que, pretendiendo borrar las huellas de un pasado disoluto, se aboca a uno de los desenlaces más perversos y sangrientos que se hayan visto sobre las tablas. El conde Federico, hijo bastardo del duque, y Casandra, esposa valedora de una alianza con Mantua, vivirán una desesperada historia de amor y pasión al filo del abismo hasta que la violencia secreta sobre la propia familia llega a las últimas (y maquiavélicas) consecuencias.
Pulsiones profundas, intereses secretos, caída en abismo: la tragedia como tormenta perfecta del alma humana”.
hoy se ha de ver en mi casaalzad la divina vara.No es venganza de mi agravio,que yo no quiero tomarlaen vuestra ofensa, y de un hijoya fuera bárbara hazaña.Éste ha de ser un castigovuestro no más porque valgapara que perdone el cieloel rigor por la templanza.Seré padre y no marido,dando la justicia santaa un pecado sin vergüenzaun castigo sin venganza.
Youkali es el país que alguien soñó…
Y al fin de casi todo, mi barca vagabunda
Mecida por las olas, con fuerza me arrastró.