Viajes y libros

En el mar

http://tanaltoelsilencio.blogspot.com.es/

Toine Heijmans

En el mar

TRADUCCIÓN DE GOEDELE DE STERCK

ACANTILADO

Inmerso en una profunda crisis personal, Donald decide navegar en su velero durante tres meses, con el silencio y la soledad como única compañía. Sólo en la última etapa de la travesía recogerá a su hija de siete años, Maria, para que lo acompañe del norte de Dinamarca a los Países Bajos. Alejados del mundo, el viaje se anuncia idílico, y entre padre e hija surge una complicidad que nunca antes habían conocido. Pero de pronto las nubes negras acechan en el horizonte y Donald está cada vez más angustiado; la noche en que estalla la temida y aterradora tormenta, Maria desaparece del barco… En el mar es una evocadora alegoría sobre la travesía de la vida y la posibilidad de gobernar el propio destino, y un magnífico homenaje a los navegantes legendarios, desde Ulises hasta el capitán Ahab.

De pronto veo las nubes. Deben de haberse formado a mis
espaldas. Algo debe de haberlas empujado hacia adelante.
Ahora flotan frente a la proa. Flotan en el aire como cantos
aplanados de color gris pizarra: enormes óvalos en suspensión.
Un gigantesco móvil perpetuo, parecido al que en su
día colgaba sobre la cuna de bebé.
Las nubes ensombrecen el alba. Apartan la luna de la
mar y me obstruyen la vista. Durante toda la noche la luna
ha desparramado su luz sobre las olas y ha custodiado el
barco, iluminándolo a modo de lamparita nocturna. Ahora
la luz está apagada y debo apañármelas yo solo.
Tiene que amanecer. Tiene que clarear. Sin embargo está
oscureciendo, como si el barco navegara de vuelta a la noche.
Como si hubiera donde elegir: adelante o atrás. Hacia
el inicio del viaje o hacia el final. El caso es que no hay elección.
Ya no soy yo quien manda.
Debo mirar la carta de navegación. Y debo beber algo,
pero no encuentro el termo de té. ¿Qué le pasa al compás?
¿Por qué ahora pienso lo que siempre hago sin pensar?
Va a llover. Lo anuncian las nubes. Y la lluvia irá acompañada
de fuertes rachas de viento. Todo es a un tiempo
previsible e imprevisible

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *